El gobernador Miguel Barbosa enfrenta todo un dilema rumbo a 2021: decidir a cuáles alcaldes de Morena se les va a permitir la reelección y también a quiénes no.
Esta decisión es muy importante porque también de esto va a depender el éxito electoral que pueda tener su partido político, Morena, rumbo a 2021, cuando habrán de renovarse las 217 presidencias municipales y las 26 diputaciones locales que estarán en juego, aunque éstas dependerán de la reforma electoral que se lleve a cabo.
En manos del gobernador estará decidir cuáles alcaldes de la 4T poblana podrán optar por buscar la reelección y cuáles no podrán hacerlo, tomando en cuenta que sólo se puede buscar repetir en el cargo a través del mismo partido político por el cual se fue postulado, a menos de que se renuncie con año y medio de anticipación a esta fuerza política.
Muchos de los actuales alcaldes de Morena, quienes gobiernan en la mayor parte de la zona conurbada de Puebla, tienen la esperanza de buscar la reelección, aunque el gobernador Miguel Barbosa se observa renuente a permitir que muchos de estos ediles repitan en sus funciones, merced al mal desempeño que han tenido.
Es un hecho que la actual alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, difícilmente podrá aspirar a la reelección debido a los errores cometidos, pero también al fuego amigo a la cual fue sometida para evitar precisamente que pudiera buscar esta legítima aspiración.
Claudia Rivera será un factor muy importante para ver hacia dónde se inclina la balanza en 2021 y lo mismo va a ocurrir con una serie de alcaldes, a quienes no se les va a permitir buscar la reelección y que forman parte de los factores de riesgo para Morena. ¿Hacia dónde se van a inclinar estos ediles y sus respectivas estructuras?
Definitivamente no creo que ninguno de ellos se vaya a quedar conforme con el hecho de que no se les haya permitido buscar la reelección, lo cual tampoco va a dejar muy satisfechos a sus respectivos equipos de trabajo, quienes ya habían hecho compromisos con muchos actores y empresarios.
Por otra parte, a quienes sí se les permita la reelección, ¿de qué privilegios gozan? ¿Por qué a ellos sí y al resto no? ¿Será porque son los consentidos y los demás los malqueridos? Y conste que serán preguntas válidas que muchos de estos ediles se podrán hacer, si es que no se les permite la reelección.
Ahora veamos qué va a pasar con todos aquellos grupos que pensaban que tenían alguna posibilidad de poder acceder al poder y que van a ser notificados de que en tal o cual municipio sí habrá reelección y que por lo tanto se deberán sumar al trabajo del alcalde en funciones ¿Cuál va a ser su reacción?
Lo mismo va a pasar con todos aquellos aspirantes a ocupar una curul en el Congreso local y también en la Cámara de Diputados y que ya se acostumbraron a que les digan diputados y a vivir a costillas del pueblo bueno que se tragó su engaño.
¿Qué van a hacer? ¿Cuántos de los actuales diputados locales y federales de Morena van a repetir en sus cargos? ¿A cuántos se les va a permitir la reelección? Y algo más importante: ¿Hacia dónde van a trabajar sus respectivas estructuras si les dice que no habrá reelección?
La verdad es que el dilema es por demás interesante y de la forma como sea resuelto dependerá en mucho el resultado electoral que podrá tener este partido político en 2021.
No va a ser fácil decirles a los que no van a tener la oportunidad que no, como tampoco va a dejar contentos a muchos, el que algunos sí puedan buscar mantenerse en el cargo. ¿Se va a mantener la disciplina?
Ya se verá.
Mucho del éxito electoral que pueda tener Morena en 2021 va a depender de esta decisión, la cual a muchos les va a gustar, pero también dejará muchos inconformes a los cuales seguramente deberá cachar la oposición, si es que se pone viva e interviene de forma efectiva.