Víctor Sánchez Espinosa, Arzobispo de Puebla, dio inicio a la Semana Santa con la celebración del domingo de ramos a puerta cerrada en la Catedral de Puebla.
El líder de la grey católica inició la celebración con la tradicional procesión de Domingo de Ramos, entre bancas vacías y sin fieles, únicamente acompañado por un par de sacerdotes y un seminarista.
Sánchez Espinosa pidió a los fieles que se sumen en la oración, en los tiempos difíciles que se viven tanto en México como en el mundo.
“Estamos viviendo una situación difícil en el mundo, pero nuestro señor es nuestra esperanza, tenemos puesta nuestra fe y confianza en el señor. Él sufrió padeció fue crucificado, murió, pero resucitó a una vida nueva y nosotros participaremos de ese sufrimiento de ese dolor, de esa cruz, pero también participaremos de su gloriosa resurrección”, destacó.
Reconoció que es una semana distinta, pues es la semana mayor y a pesar de estar en casa se debe celebrar.