Solamente alguien con gravísimos problemas de autismo político y social puede actuar como Claudia Rivera Vivanco, presidenta municipal de Puebla.
Evaluando a la chica que despertó expectativa en las elecciones de 2018, se debe decir, hoy, que:
Políticamente, ignora y sobaja al cuerpo de regidores ¿de regidores? Les aplica la máxima de Salinas: Ni los veo, ni los oigo.
Mediáticamente, aparece entre los 100 alcaldes del país peor evaluados. Los peores, entre los peores.
Moralmente, ingrata.
Económicamente, denunciada de alterar precios de compra de despensas para los pobres y cínicamente, en medio de la pandemia.
Socialmente, irresponsable con la compra de ventiladores usados para pacientes de coronavirus.
Claudia, como “activista de izquierda”, es respetada.
Claudia, como presidenta municipal, tristemente decepcionante.
Lástima, pintaba bien.
Punto.
He dicho y he escrito.
LO QUE PERDERÁ EL FISCAL
Obviamente en su ánimo no está.
Cuando preguntó en “la federación” le dijeron: Si quieres meterte en problemas, cámbialo; si quieres llevar la fiesta en paz, déjalo.
Y así fue.
Entonces, para no contradecir al gabinete de seguridad y a la Fiscalía General de la República, el Poder Legislativo recibió instrucciones para la designación por siete años del fiscal General del Estado Libre y Soberano de Puebla.
Peeeeero, siempre los peros.
Las señales indican que al más puro estilo barbosista de “patín y guante”, a Gilberto Higuera Bernal le están aplicando “la aburridora”.
El fiscal ha sido obligado a romper su estilo y los procedimientos medianamente legales. Veamos:
1. La detención de Felipe N, aún presidente municipal de Tehuacán, es el ejemplo del primer preso político de este gobierno. El procedimiento jurídico fue violentado por el afán protagónico. A Felipe N lo fotografiaron, distribuyeron su imagen y la publicitaron como si estuviera “fichado”, sin tapar su ojos como marca ahora el protocolo. Y, ni la foto, ni la publicidad estuvieron a cargo de la Fiscalía.
2. La carpeta de investigación contra Eukid N tuvo una velocidad inaudita. El procedimiento fue exprés y eso que la Fiscalía, por comodidad, ya no persigue delitos menores. En cambio, existe una averiguación previa (como centenas) que después de seis años sigue en el archivo, a pesar de ya tener orden de aprehensión.
3. Los fallidos y ridículos operativos de cateo en casas de los hermanos Valencia, de Venustiano Carranza, que por ser tan trompicados, rompen con el estilo profesional del fiscal.
4. La declaración de Luis Miguel Barbosa, revelando en conferencia de prensa que uno de los hermanos Valencia tiene orden de aprehensión: ¿Quién le dio esa información? ¿Es pública? ¿Y la “secrecía”? Ahora, en Puebla, si quieres saber sobre quién pesa orden de aprehensión, chécalo en el Facebook durante las mañaneras de Barbosa.
Y todo esto rompe con el manual básico de la legalidad (aunque sea disfrazada) con la que debe trabajar la Fiscalía General del Estado Libre y Soberano de Puebla.
Para mí que Gilberto Higuera Bernal perderá en medio año en Puebla todo lo ganado a lo largo de su exitosa carrera.
Punto.
He escrito.
NI OBAMA
Qué tal que, para la Agencia de Energía del Estado, el gobierno de Puebla contratará a la ingeniera y maestra en Desarrollo Sustentable, Rocío Peña Nahle, la hija de Rocío Nahle, secretaria de Energía del gobierno de AMLO-co. Jugada de tres bandas que no la hace ni Obama.
EL VERDUGO
Unos 400 presos podrían obtener su liberación anticipada por esa práctica de indulto que inventó el gobierno poblano. A éstos no se les aplica el quédate en casa. El Verdugo dice: En una de esas les da Covid-19 y ya ni alcanzan a salir.
Recuerden: De Buena Fuente no es la mejor columna política, pero tiene a los mejores lectores.