El gobierno de Puebla recurrió al asesor de seguridad Ardelio Vargas Fosado, ex secretario de la Policía Estatal durante la administración de Rafael Moreno Valle Rosas, para negociar con los uniformados que iniciaron una protesta desde el martes por la mañana y quienes se negaron a dialogar con el actual titular, Raciel López, oriundo de Chiapas.

Tras varias horas de negociación, los quejosos aceptaron un aumento de 20% aplicado al rubro “IJ”, el cual se reflejará el 30 de junio y será retroactivo al día primero de este mes.

Con ello, los uniformados recibirán un sueldo base de siete mil 178 pesos mensuales y cuatro mil 806 pesos del rubro IJ, lo que sumará un total de 11 mil 984 pesos. Sin el incremento, los uniformados recibían un pago neto de 10 mil 146 pesos.

En la negociación también intervino Carla Morales, designada como delegada de seguridad en el municipio de Puebla y quien también fue funcionaria durante el morenovallismo.

Además del alza salarial, las autoridades estatales también ofrecieron aumentar su seguro de vida a 497 mil pesos, en caso de fallecer en cumplimiento del deber, y 242 mil pesos por muerte natural.

Una de las peticiones de los policías estatales se centró en la destitución de los mandos provenientes de Chiapas, lo cual fue rechazado por el aparato estatal. A cambio, sólo aceptaron “un cambio de actitud”, sin represalias para quienes mantuvieron el paro por 62 horas.

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LA PROTESTA

La tarde de ayer, los uniformados también se enfrentaron entre sí, ya que algunos elementos reprocharon a la comisión de representantes haber exigido el 50% de aumento al salario.

Sin embargo, los policías llegaron al acuerdo de que finalizarían las negociaciones hasta que la mayoría estuviera de acuerdo.

Por la mañana, en rueda de prensa virtual, el gobernador Miguel Barbosa Huerta llamó a los policías a establecer una mesa de diálogo con las autoridades para solucionar sus reclamos.

“Yo llamo a los policías en paro a que tengamos un dialogo para resolver todo reclamo, de acuerdo con una racionalidad gubernamental administrativa, financiera”, pidió.

Afirmó que el miércoles se reunieron con una comisión de las diferentes áreas de la dependencia, quienes sí aceptaron el aumento de 14% ofrecido por la gestión estatal.

Sin embargo, a los inconformes les pidió regresar a trabajar a fin de no afectar la seguridad de la ciudadanía.

“Hoy la recuperación salarial tiene que ser parte de un proceso, (…) el gobierno hace un gran esfuerzo de finanzas públicas y lo acuerda con los representantes de policías, (…) dije que invitaba a los inconformes a que vinieran acá a hablar, a dialogar, a eso yo lo llamo no ser utilizado por gente externa, yo los llamo a dialogar, no tengo problemas con algún trabajador que se exprese a sus legítimos derechos, pero no somos ingenuos sobre lo que pasa en ese movimiento, queremos que la cosa camine bien, vamos a ser tolerantes, vamos a actuar con mucha sensibilidad”, precisó.

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