Yoshihide Suga se convirtió ayer en nuevo primer ministro de Japón. Se comprometió a contener el Covid-19 y promover reformas tras retener a casi la mitad del gabinete de su predecesor, Shinzo Abe.

Suga, de 71 años, dijo que seguirá con las políticas de crecimiento de su exjefe, denominadas “Abenomics“, al tiempo que promoverá reformas como la desregulación, la digitalización y la reducción de barreras burocráticas.

En declaraciones que parecieron minimizar la posibilidad de un adelanto electoral, afirmó que lo que más quieren los japoneses es contener el brote de coronavirus y revivir la golpeada economía: “Es lo primero en lo que quiero trabajar con mi gabinete”.

En octubre de 2021 debe celebrarse una elección para la Cámara baja del Parlamento; se especula que Suga adelantaría los comicios para consolidar su mandato. Abe renunció tras casi ocho años en el poder.

LEG

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