Para el Apertura 2012, Lobos BUAP se reforzó con nueve elementos para encarar la Liga de Ascenso MX, entre ellos un defensor surgido de los Pumas de la UNAM que, si bien ya tenía varios años de haber debutado en Primera División, su mayor recorrido había sido en Primera A.

Alex Diego llegó con casi 27 años al equipo dirigido por Sergio Orduña. Con 91 minutos jugados en el Clausura 2012 con los Potros de Hierro del Atlante, Diego Tejado era una de las piezas importantes para La Jauría y claro, era una de las entrevistas que tenía que entregar reporteando para Televisa Puebla.

“Diego, buen día. Después de jugar en Primera División el torneo anterior con Atlante, llegas a Lobos BUAP… ¿cómo tomas este reto?, ¿qué puede aportarle Alex Diego al equipo?”, esa fue mi primera pregunta al abordarlo junto a mi compañero de mil batallas, Martín Caselín.

Su respuesta, debo reconocer, me dejó frío y con ganas de no formular la segunda y dejarlo botado: “Sí, como te digo, estoy contento, ilusionado y con ganas de ya empezar el torneo”, sé que, normalmente muchos jugadores-técnicos tienen respuestas de cajón pero, ¿el ”sí, como te digo” en la primera?

“¿Qué conoces de Sergio Orduña como técnico y qué sabes de Lobos BUAP como club?”, insistí. “Bueno, como te digo es buen equipo, buena plaza y con responsabilidad vamos a portar estos colores”. Cortamos entrevista, agradecí su tiempo y armamos noticiero con declaraciones de Hebert Alférez, Ismael Iñiguez y el profe Orduña.

A ocho años de distancia, celebro que el hoy entrenador de Gallos Blancos de Querétaro no es más ese chavo inexpresivo, con frases de ‘librito’ y con un semblante ‘de pocos amigos’ por haber sido ‘castigado’ a jugar en la liga de plata.

Hoy con 35 años lo escucho maduro y conciente del rol que juega, a pesar de la crítica por su inexperiencia en el máximo circuito. Veo a un equipo queretano trabajado, con intensidad, orden, cediendo la iniciativa, pero cómodo sin balón, con jugadores conocedores del modelo de juego, con variantes, con transiciones ofensivas, con diferentes parados tácticos, pero siempre abrazado a un idea clara.

Hoy hay fondo en sus declaraciones, hay forma en su conocimiento y hay desarrollo en sus principios. “Hicimos un análisis de Atlas, viendo cuáles son sus debilidades, cuál es nuestra fortaleza y a partir de ahí se prepara el partido. No es lo mismo atacar al América que atacar al Atlas, a partir de ahí formamos una idea”, decía unas semanas atrás.

Luego de 12 jornadas, sus Gallos suman 12 puntos, han derrotado a América, Cruz Azul y goleado a Toluca, y aunque esto no ha alcanzado para estar en puestos de clasificación, su equipo ofrece fútbol atractivo, demuestra el arduo trabajo y establece una premisa fundamental: la capacidad no está peleada con la juventud.

 

Por Alfredo González – @AlfredoGL15