Una mujer se burló e insultó a un oficial que la detuvo por utilizar el celular mientras conducía, en la ciudad de Columbus, Ohio, Estados Unidos.

El oficial se percató de la acción de la conductora, quien en el asiento trasero llevaba a su hija de aproximadamente 2 años de edad; por lo que le marcó el alto y la confrontó.

“La vi manejar por toda la calle mientras miraba su teléfono. Por toda la calle”, dijo el agente.

La mujer negó lo ocurrido, pese a que el oficial le indicó que todo había quedado grabado por su cámara y que tendría que detenerla.

El policía le pidió que no le argumentara que buscaba una dirección en el teléfono a lo que ella respondió que estaba en su barrio y lo cuestionó de manera agresiva.

“No lo necesito, estoy en mi maldito barrio. ¿De verdad, no tiene otra cosa que hacer en su maldito día?”, dijo la conductora.

El oficial le pidió que estacionara el vehículo en la estación de gasolina; sin embargo, ella siguió respondiendo de igual manera.

Tras dirigirse a la estación, él le pide que permanezca en el auto, pero ella le dice que le tomará una foto, en caso de que la tire al suelo con “brutalidad policial“.

El agente solicitó los documentos de la conductora y que metiera sus pies al vehículo y cerrara la puerta. Segundos después le reitera que escribía en el celular y comentaba una imagen, pues había visto una burbuja verdad, esto mientras ella conducía con su hija en el asiento trasero.

“¡Hombre, no estaba escribiendo! Estaba… Es una cosita, quizás no lo sepa porque es un viejo. Uso esta cosita”, le contesta.

El policía le informó que no requería de su seguro, pues lo buscaría y le extenderían una citación. Seguido de ello, le levanta una infracción y le reitera que vuelva a su vehículo.

Ella le cuestiona si es ilegal que descienda, a lo que él le informa que eso depende de cómo él perciba su seguridad, y dado que ella se había comportado de manera agresiva, era necesario que permaneciera en su auto con la puerta cerrada.

“¡Vamos, hermano! Me detiene… No me importa, le llamaré como quiera”.

“Su hija depende de usted y su vida está en peligro por lo que usted hacía. Está poniendo en peligro todas nuestras vidas”, le explica el agente.

A ello, la mujer responde que él había asumido que escribía cuando en realidad usaba su voz. Tras informarle el juzgado al que debía asistir, ella le contesta “usted sólo quiere verme otra vez”.

“Me gustaría poner esta grabación al juez. Será absolutamente excepcional, le entenderá. Puede ir el 19 a las 9:00, esta es la dirección, sala 1b, para declararse no culpable ante un juez. Su segunda opción: pagar la multa en persona en el centro de la ciudad”, explica el oficial antes de que se le caiga la pluma.

Al ver el accidente que tuvo, la conductora alza la voz y lo acusa de poner en riesgo la vida de todos, burlándose de la multa a la que fue acreedora.

“¡Dedos resbaladizos! ¡Nos pone en peligro a todos en la carretera!”.

Además, al verlo apoyarse en el auto para escribir, le espeta que no lo haga, pues es su propiedad. Asimismo, le pide detener el tráfico para que ella pueda salir al camino y retirarse, pero el agente le indica que eso no es posible.

La mujer le reclama, le dice que sabe que tiene a una niña y al verlo alejarse le grita “¡Imbécil!”.

Con información de RT

 

fahl

 

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