Luis Suárez fue diagnosticado con Covid-19 durante la concentración con la Selección Uruguaya para la eliminatorias de Conmebol para el Mundial de Qatar 2022. Sin embargo, las alarmas en el seno charrúa se encendieron, pues horas antes de arrojar positivo, el delantero del Atlético de Madrid convivió con sus compañeros.
Este capítulo se añade al historial de Suárez, quien comenzó con los pasajes bochornosos cuando jugaba para el Ajax y mordió a Bakkal, adversario del PSV en 2010. La situación se repitió en la Premier League, cuando militaba con el Liverpool y y el afectado fue Ivanovic, defensa del Chelsea. Pero la mordida cumbre fue la que propinó a Chiellini en la Copa del Mundo Brasil 2014.
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Hace poco fue protagonista de otro penoso acontecimiento, pues en su búsqueda del equipo al no tener cabida en Barcelona, la Juventus apareció como un gran destino, pero el uruguayo se cerró colonias puertas, ya que se le acusó de hacer trampa en la prueba para obtener la ciudadanía italiana, motivo que inició una investigación por parte de las autoridades de aquel país y no volvió a pisar suelo en esos lares.
Ahora al ser positivo por Covid-19, Suarez ya está fuera de la concentración de su selección para ser tratado, pero dejó la incertidumbre en lo más alto, pues con el pasar de las horas pueden aparecer más casos en el combinado charrúa, el cual afronta hoy su partido ante Brasil, un escenario que puede desatar una catástrofe para ambas selecciones.
ica