El Ayuntamiento de Puebla una vez más fue rebasado por casi 2 mil vendedores ambulantes que ocupan el Centro Histórico para vender comida, ropa, telefonía, calzado y artículos navideños en plena pandemia provocada por el coronavirus.
En recorrido se logró observar que los vendedores informales no usan cubrebocas, no aplican gel antibacterial a las personas que caminan por la zona, todo ocurre ante la vista de supervisores de Normatividad Comercial del Ayuntamiento de Puebla.
Sobre el piso de la calle 5 de Mayo hay puestos de comida, aguas frescas, venta de relojes y perfumes, hasta postres.