Pese al decreto estatal que prohíbe la instalación de puestos ambulantes en los 217 municipios, los comerciantes de la capital se instalaron en las calles del Centro Histórico, principalmente en la 8 poniente.

Los informales ocupan también la 6, 10 y 12 poniente, lo cual está prohibido debido a que no siguen las medidas sanitarias y provocan aglomeraciones que aumentan el riesgo de contagio de Covid-19.

Incluso el gobierno municipal colocó carteles en la calle 5 de Mayo para que los comerciantes respetaran lo establecido por la autoridad estatal, pero fueron ignorados.