Se va… se va
Se trata de Liza Aceves López, de la Secretaría General en la administración municipal de Claudia Rivera Vivanco, en la antesala de la selección de quién Morena decida para competir por la capital en el proceso de junio próximo.
Antes se fue Alejandra Rubio Acle, quien terminó por tropezar con los polémicos bolardos que a nadie dejó satisfechos; y también de quién fue titular de Desarrollo Urbano, Beatriz Martínez Carreño.
En ambos casos se fueron en medio del escándalo; con Aceves no tendría porqué ser diferente.
¿Será?
Otro que se va…
Es el diputado local del Partido del Trabajo, José Juan Espinosa Torres, a quien en el Congreso del Estado ya nadie toma en serio.
Según su propia versión, solicitará licencia a la diputación y amenazó (oootra vez) con hacer anuncias este viernes, luego de que la justicia federal le negó un amparo ante una posible orden de aprehensión.
La rueda de prensa virtual será desde un refugio, o en San Pedro Cholula, su lugar de origen en donde hace semanas nadie lo ha visto físicamente.
¿Será?
Salvadota millonaria del PRI
El equipo jurídico del PRI poblano, el cual comanda el abogado José Mario Conde Rodríguez, salvó a su partido de la ruina patrimonial.
El subsecretario de lo Contencioso Electoral, César Zavaleta Márquez, se anotó el triunfo ante la Sala Regional CDMX del Tribunal Electoral del Poder Electoral de la Federación, al librar al tricolor del pago de 7.7 millones de pesos, en el proceso RAP-1/2021.
La sanción era por la presunta compra irregular de tóner en 2019, cuando los presidentes estatales fueron Javier Casique Zárate y Lorenzo Rivera, unos meses de ese año, cada uno.
Bueno, ni hipotecando su sede de la Diagonal Defensores hubieran podido pagar. Eso sí, una cosa deberían saber en el PRI: cualquier abogado hubiera cobrado una comisión de, mínimo, 15 por ciento del monto en litigio. Como reza el dicho: “Amor que no se ve en la nómina no es amor”.
¿Será?