La presidenta municipal de San Martín Texmelucan, Norma Layón, decidió volver a inscribirse en el proceso interno de Morena con el peor de los instrumentos bajo el brazo: la antipolítica.

La semana pasada descubrió a la regidora Elisa Martínez Vázquez en la mesa de un restaurante con un comensal que comenzó a generarle encono, más allá de la divergencia electoral: Edgar Salomón Escorza, virtual candidato por el Partido Acción Nacional.

Ufana, la morenista que se ha distanciado de todos los integrantes del equipo original con quienes llegó a la administración en 2018 por la forma poco decorosa de conducirse, decidió tomar el camino del amago.

Ya entrada en uno de los arranques que todos en el municipio conocen, advirtió de consecuencias por la “traición” en la que había incurrido al ocupar un asiento en la mesa de quien será su adversario en la contienda política por comenzar.

La regidora receptora de la advertencia que llegó a esa posición por la vía plurinominal no se quedó callada, ni guardó la ofensa. Respondió a la amenaza abierta de quie no sólo no construye, sino dinamita toda posibilidad de diálogo.

Layón no sólo carece de oficio y vocación política. Lo suyo es la altanería en la función pública que ha generado enojo en la sociedad de Texmelucan que votó por un cambio que no sólo no llegó, sino que profundizó las prácticas de gobierno del pasado.

La percepción que existe en ese municipio tiene método y rigor. Una encuesta de la empresa Mas Data de Pepe Zenteno la ubica como la servidora pública con uno de los mayores niveles de rechazo.

El nivel de aprobación es de apenas 3 por ciento, junto al 10 por ciento del gobernador Miguel Barbosa y 32 por ciento del presidente Andrés Manuel López Obrador. El rechazo de la edil es de un escandaloso 65 por ciento, dice la medición.

La encuesta efectuada por la empresa demoscópica ofrece un panorama desalentador para el Movimiento de Regeneración Nacional que en 2018 obtuvo una holgada victoria en Texmelucan.

En la era Layón, 40 por ciento no percibe el cambio que esperaba y casi 33 por ciento tampoco lo ha visto. Lo que sí entiende el electorado es que no quiere nada con la actual presidenta municipal: 62 por ciento no volvería a sufragar por su oferta política.

A la pregunta de “Para presidente municipal de San Martín Texmelucan ¿usted votaría por…?: Salomón Escorza obtiene la más alta votación, le sigue el ex edil Rubén Garrido y en el sótano, con 3 por ciento la presidenta municipal en turno, empeñada en la reelección.

Layón en Morena se convirtió en la paráfrasis de lo que sucede con los gobiernos encabezados por improvisados en la arena pública. Llenos de improvisación, inexperiencia y sobrada arrogancia.

Lejos de construir una plataforma política inteligente y empática que le permitiera viabilidad política a una forma de gobierno que alentó la esperanza de los votantes, está por poner en la antesala de la derrota a Morena, la marca política mejor evaluada.

 

@FerMaldonadoMX

parabolica.mx escribe Fernando Maldonado