Si el Gobierno federal tuviera un cambio de actitud ante la inversión privada y pública, con políticas amigables a la inversión “con transparencia y sin privilegios”, la economía del país podría no sólo alcanzar sus niveles económicos previos a la pandemia en años siguientes, si no que además podría sobrepasarlos, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

En su informe semanal, el organismo añadió que luego de la pandemia generada por el Covid-19, el Gobierno debe de ser claro y brindar seguridad del Estado de derecho en materia de inversión, a lo que se agrega, que debe de reconsiderar las prioridades de los proyectos de inversión del Estado.

El organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) refirió que la inversión total cayó -18.3% en 2020, sin embargo, añadió que la inversión venía deteriorándose desde que inició el actual Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, de tal forma que en los dos primeros años de su sexenio, ésta se redujo tres puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Y es que la inversión privada acumuló nueve meses a la baja, a partir de la creciente incertidumbre por parte del Gobierno y su partido al emitir señales negativas que la afectan, mientras que la inversión pública se ubicó en 2.6% del PIB, su nivel más bajo desde la década de 1930.

“Paradójicamente México tiene ahora posibilidades de no solamente lograr una recuperación del crecimiento económico, sino más aún, de incrementar su potencial. No obstante, el reto es que las políticas públicas se aboquen a ello con determinación”, afirmó.

Destacó que las oportunidades de crecimiento de la economía mexicana están, primordialmente, en las exportaciones de mercancías, sobre todo por los apoyos fiscales que dio el gobierno de Estados Unidos a sus familias, sin embargo, es indispensable fortalecer la entrada de capitales al país.

Añadió también que el sector bancario en el país se mantiene sólido, está bien capitalizado y ha actuado con cautela, por lo que es probable que los problemas financieros de empresas virtualmente quebradas puedan salir adelante.
Señaló que hay una situación sana con la deuda pública de México, por lo que el país tendrá que hacer menos ajustes fiscales que otros países cuando la pandemia se desvanezca.

 

Riesgos a la vista

A pesar de que se vislumbra una recuperación económica, aún existe incertidumbre para garantizar un mayor crecimiento económico:

1: Falta de garantía en el Estado de derecho.
2: Incertidumbre a las inversiones privadas nacionales y extranjeras.
3: Insistencia a proyectos de infraestructura prioritarios como el aeropuerto de Santa Lucía, la refinería de Texcoco y Tren Maya.

LEG

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