Así como en las distintas plazas de la República, Puebla se vistió de gala para celebrar el regreso del beisbol veraniego y el Estadio Hermanos Serdán fue el escenario donde Guerreros y Pericos ofrecieron tres exhibiciones excepcionales de beisbol.

El viernes 21 de mayo, la casa emplumada registro un aforo prácticamente lleno para el encuentro inaugural luego de una larguísima ausencia de la pelota. Un aforo que en el que no estaba permitido más del 50% de la capacidad total fue suficiente para que el ambiente fuera excepcional.

Ceremonia con el Himno Nacional entonado por los asistentes y la voz de bienvenida de José Miguel Bejos, presidente de los Pericos, quien no ocultó la alegría de recibir a los aficionados emplumados en la renovada casa del equipo.

Se cantó el play ball y de inmediato comenzaron los lanzamientos, strikes, bolas, ponches, hits carreras … Toda acción se vivió con intensidad y así tenía que ser para alentar a la novena local, pues los Guerreros pegaron primero.

Apenas en el tercer inning, los de Oaxaca se pusieron al frente con un marcador de 6-0 hasta que la ofensiva verde despertó y de a poco se vio más precisa con el bate. Danny Ortiz fue quien se encargo de impulsar las primeras carreras que devolvieron ánimo a los asistentes.

En lo que parecía una remontada tempranera, los Guerreros se encargaron de evitarla con una carrera más en el cuarto episodio, sin embargo, a partir de la quinta entrada, Pericos sacó su mejor beisbol.

Rally de cinco carreras en la sexta entrada para desatar la locura en el Hermanos Serdán y que llevó hasta el final del partido la alegría de la fanaticada con el primer triunfo de la temporada.

Gritos, saltos, una cerveza, una cemita, un souvenir de la tienda… La visita al estadio volvió a ser la experiencia por la que pidieron muchos miles y que se volvió realidad. Los pasillos de la casa emplumada dejaron de estar en silencio.

Misma dinámica se vivió el sábado en punto de las 17:00 horas con otro juego en el que los batazos cayeron al por mayor. Los dos equipos lucharon por la victoria en cada entrada y el triunfo pudo ser para cualquiera, literalmente, sin embargo, el escuadrón emplumado con otra remontada culminó la obra con la carrera del triunfo en la novena.

Marcador final de 13-14 que dejó a los asistentes con el corazón latiendo a mil por hora. Inicio de 2-0 con la serie asegurada, pero con un compromiso todavía por delante.

Domingo, tercer y último juego con la misma tónica con la que se desarrollaron los dos anteriores: carreras por montón. En este caso, los visitantes no quisieron irse con las manos vacías y devolvieron la dosis a los poblanos.

Pericos tuvo el dominio hasta el cuarto inning con marcador de 4-9, ventaja que desapareció en el quinto episodio con un rally de siete carreras de parte de Guerreros. No solo fue esa entrada pletórica, sino que las últimas cuatro tuvieron a un solo equipo anotando.

La diferencia aumentó cada vez más hasta la novena, cuando los oaxaqueños metieron 21 carreras, cifra más que suficiente para cerrar el encuentro sin mayor problema y llevarse su primer tirunfo.

Al final, todo fue una fiesta en la Angelópolis mediante el beisbol. El diamante volvió a relucir y la afición poblana a disfrutar del Rey de los Deportes con un equipo que ilusiona, tal como los otros 17 equipos en sus respectivas plazas.

La próxima cita del escuadrón emplumado es en Veracruz, ante uno de los dos equipos que se unió a la LMB: El Águila. Difícil repetir la lluvia de carreras de la primera serie, más no imposible. 83 visitas al plato tras recorrer las tres bases fue lo que se registró el fin de semana en el Hermanos Serdán, algo que es una premonición de algo grande en esta temporada.

 

 

fahl

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