La orden de aprehensión librada en contra de Francisco Javier García Cabeza de Vaca dejará un tufo de uso electoral de las instituciones de procuración de justicia en la era de la Cuarta Transformación, según la opinión de los seguidores del conservadurismo.
La presunción de inocencia quedará para el olvido, pues el juicio popular ya tiene un veredicto para un personaje forjado en la trama oscura, y rodeado de la peor ralea de la clase política que recibió privilegios a manos llenas.
De quienes acompañaron el ascenso del mandatario, ahora sin fuero, estuvo el fallecido Rafael Moreno Valle, el gobernador de Puebla con aspiraciones presidenciales.
La reportera Jennifer de la Fuente -ahora directora editorial de Intolerancia Diario- publicó información el 30 de mayo de 2016, cuya cabeza fue: “Con despensas del DIF poblano Moreno Valle apuntala campaña en Tamaulipas”.
El 28 de mayo de aquel año, ya montado en su recorrido por casi todo el país, el panista poblano llegó a apoyar y aportar a quien hoy cuenta con orden de aprehensión.
No llegó con las manos vacías: unas 18 mil despensas con logotipos del DIF de Puebla y el gobierno de la administración estatal fueron encontradas por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional en una bodega en Reynosa.
Nadie ofreció en Puebla una explicación, aunque todo mundo lo intuía, sobre las razones que llevaron a que un gobernador elegido bajo el estribillo de campaña “lo mejor está por venir” en 2010, seis años después arrebatara la posibilidad de tener una despensa a 18 mil familias en condiciones de pobreza.
El personero de la época, hoy detenido en el reclusorio de Tepexi de Rodríguez por acusaciones de extorsión, falsear información y lavado, Eukid Castañón, se ufanaba de tener en la bolsa a García Cabeza de Vaca.
Por estos días, otro poblano se había convertido en un feroz defensor de ese inmoral tamaulipeco: Javier Lozano Alarcón, el panista y priista que peor reputación posee en círculos de poder.
Hace unos días llamó ignorante a un paisano suyo: Ignacio Mier Velazco, el coordinador de la bancada de Morena en San Lázaro, y que, como aquél, también fue priista privilegiado.
De la responsabilidad de los delitos que se le acusan a Cabeza de Vaca, pocas certezas tendrá la oposición que acusa a Andrés Manuel López Obrador de construir la “república de un solo hombre”. Así lo dijo Felipe Calderón en su visita a Puebla, para apuntalar a su amigo Eduardo Rivera Pérez.
Al igual que el gobernador de Tamaulipas, AMLO fue sometido a un proceso de desafuero entre 2004-2005, cuando era Jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Vicente Fox, el panista, fue el principal orquestador. Ahí comenzó el ascenso del popularmente conocido “Peje”, lo que no sucederá con el tamaulipeco que se rodeó de la peor expresión del panismo.
Parabólica escribe Fernando Maldonado