Una reducción significativa en el abasto de semiconductores está provocando varios cuellos de botella en muchas industrias alrededor del mundo (desde fabricantes de aparatos electrónicos, computadoras y dispositivos de comunicación, entre otros).
Debido por un lado a la creciente demanda de dispositivos electrónicos (como consecuencia del confinamiento, la educación a distancia y el teletrabajo) y por el otro a la recuperación de los mercados de vehículos, el surtimiento de estos componentes en la industria automotriz también ha experimentado un cuello de botella desde el inicio del año. El resultado de esto anterior son ajustes en toda la industria de producción de vehículos que afecta a las marcas del Grupo Volkswagen.
En los meses recientes, el Grupo Volkswagen ha estado trabajando intensamente y de manera exitosa para minimizar los efectos del desabasto global de semiconductores en la producción del Grupo. Esa es la razón por la cual la producción no ha sido afectada a gran escala. Actualmente asumimos que el suministro de chips continuará siendo complejo en los próximos meses.
En ese sentido, Volkswagen de México prevé que se lleven a cabo nuevos ajustes en su programa de producción, los cuales darían comienzo a partir del mes de junio y en distintos momentos para sus tres segmentos de producción; previendo retomar sus actividades de forma paulatina conforme el abasto se garantice, haremos todo lo posible por recuperar la producción posteriormente durante el año.
Cabe señalar que durante este periodo se llevarán a cabo en la fábrica actividades de mantenimiento.
La empresa lleva a cabo un monitoreo permanente de la situación, que le permita retomar una estabilidad en el surtimiento de materiales a sus líneas de fabricación.