El ayuntamiento de Puebla terminó por aceptar la mala calidad en obras entregadas, al mismo tiempo que se reveló la huida de la inversión que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano del Gobierno Federal haría en el municipio.
Fue el secretario de Infraestructura, Israel Román Romano, quien aceptó que un 60% de las vialidades en la capital poblana registran algún daño, incluso en las que ha intervenido el actual gobierno municipal.
“Alrededor del 60% de las zonas o vialidades que están pavimentadas, ya sea con concreto asfáltico, con hidráulico o con adoquines, ya presenta algún tipo de daño”.
En rueda de prensa, indicó que las afectaciones se han presentado en obras realizadas con concreto asfáltico, hidráulico y hasta en adoquines.
Román Romano dijo que más de 7 mil 200 calles del municipio carecen de pavimentación, pero para poder realizar los trabajos se necesita una inversión de más de 12 mil millones de pesos.
Al mismo tiempo, el representante del ayuntamiento dijo desconocer la determinación de la Sedatu con la que se cancelan proyectos de rehabilitación del Zócalo de Puebla, reconstrucción del mercado Amalucan y el adoqunamiento de la 10, 12 y 14 Poniente – Oriente.
El funcionario señaló no contar con ninguna notificación al momento, luego de que la dependencia, a través de su página web, quitara las obras de su catálogo de intervenciones.
Por su parte, el gobernador Miguel Barbosa lamentó la posible cancelación de las obras federales, al mismo tiempo que deslindó a su administración de la planeación de las mismas.
“Debo decir y lo repito y lo he dicho antes: esas obras que SEDATU federal decidió llevar a cabo en el municipio de Puebla y en San Andrés Cholula no fueron decididas con la opinión del gobierno del Estado, no sé dónde se tomó esa decisión pero se llevaron a cabo”.
Dichos proyectos contaban con una inversión conjunta superior a los 135.6 millones de pesos que llegarían a la capital.