Trabajadores comenzaron con el retiro de la valla de madera que rodea el zócalo de la ciudad de Puebla, instalada para proteger las obras de remodelación que pretendía hacer la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

La plancha se encontraba cercada desde la segunda quincena de marzo cuando comenzaron las labores del gobierno federal. El proyecto contemplaba una inversión de 60 millones de pesos para devolver al zócalo su imagen original.

Sin embargo, el 19 de junio la Sedatu confirmó que los trabajos finalmente serían solo de mantenimiento para que pudieran estar terminados en los tiempos establecidos.

Durante los tres meses que estuvo cerrado el zócalo, hubo reproches de los comerciantes cercanos quienes acusaron afectaciones en sus ventas.