Pudo haberse tratado de un encuentro entre dos amigas, paisanas o afines a las ocupaciones propias de su generación, pero la reunión tiene un especial significado político a la luz de dos acontecimientos de que corren en paralelo y que cruzan por la región de Tecamachalco.

El 9 de agosto en un Itallian Coffe ubicado en las periferia de la capital, justo por la salida a aquella región se reunieron quién ahora es diputada local plurinominal, Daniela Mier Bañuelos y Adriana Martínez Fuentes, hermana de un líder huachicolero que opera en el triángulo rojo a quien la voz popular llama “El Toñín”, líder criminal considerado por las plumas afines como un “benefactor” en la región.

La reunión entre ambas tiene un especial significado tras la detención de la diputada suplente, Sandra Nelly Cadena Santos, ex secretaria general del ayuntamiento en Tecamachalco, pareja sentimental de un traficante de armas de alto poder también detenido la víspera por la Fiscalía General del Estado, de nombre Jesús Portilla García, originario de Coatzacoalcos, Veracruz.

El hermano de Adriana, la mujer que frecuenta la hija del coordinador de la bancada de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier Velazco y a quien en círculos políticos se le ve como probable candidato al gobierno de Puebla en 2024, adquirió del detenido un fusil Barret calibre .50, un arma utilizada en diversas guerras alrededor del mundo y cuyo costo oscila entre los 11 y 12 mil dólares, sin tomar en cuenta que cada cartucho puede cotizarse en 150 dólares.

El comprador de esa arma, utilizada por las fuerzas especiales de diversos ejércitos en países desarrollados y a quien El Universal Puebla le dedicó una biografía bajo la cabeza “El Tonín ¿el Robin Hood de Quecholac?”, ha sido un huidizo criminal que utiliza escudos humanos cada ocasión que las fuerzas armadas o elementos investigadores realizan operativos en Palmarito Tochapan, considerado uno de sus feudos.

El vendedor de ese artefacto bélico de élite, Jesús Portillo García, no sólo almacenaba armas, cartuchos y granadas, sino dos figuras emblemáticas: una Santa Muerte y una réplica del “santo de los narcos”, Jesús Malverde.

Ahí hacía vida en pareja con la diputada suplente por Morena de la propietaria, Ruth Zárate Castro, quien junto con Daniela Mier Bañuelos y su hermano, el presidente municipal electo, Ignacio, son consideradas cuotas que Mario Delgado, líder del partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador, entregó a su coordinador, el patriarca Mier Velazco.

El proveedor de armas de El Toñín, detenido junto con su pareja, la diputada suplente, es señalado por habitantes de la región de Tecamachalco de ofrecer protección a grupos delictivos dedicados al robo de hidrocarburo, narcomenudeo, extorsión y homicidio.

El vínculo con el coordinador de los diputados federales de Morena corre en dos vías: el padrinazgo que ejerció para llevar a quien fue funcionaria en el ayuntamiento de Tecamachalco, centro de su cacicazgo, lo coloca en una incómoda posición; y la relación de la parentela del Toñín con la de propio Mier Velazco. Datos para el apunte futuro.

 

@FerMaldonadoMX

Parabolica.mx escribe Fernando Maldonado