Un silencio ensordecedor. Jugadoras denuncian abuso sexual dentro de sus ligas

Algo ha estallado en el mundo deportivo femenil pues en los últimos días han salido a la luz una serie de abusos de los que han sido víctimas un importante número de jugadoras.El escándalo comenzó el 1 de octubre en Estado Unidos, cuando la la liga femenina de Estados Unidos (NWSL), que cuenta con 10 equipos,  dio a conocer un buen número de denuncias en contra del entrenador Paul Riley , estas van desde comentarios inapropiados sobre el peso y orientación sexual de las jugadoras hasta acoso y  abuso sexual.

 

El medio deportivo, The Athletic publicó una investigación fruto de entrevistas a más de una decena de atletas de cada equipo donde estuvo entrenando desde 2010. El informe  realizado también señaló que la conducta de Riley había tenido como víctimas a tres ligas y tres equipos desde 2011.

 

Entre los nombres de las afectadas aparecen el de Meleana Shim   y  Sinead Farrelly, quienes denunciaron públicamente haber sido víctimas de acoso y coacción sexual por Riley, además de haber sido discriminada por su orientación sexual.

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Farrelly jugó para tres equipos bajo el entrenamiento de Riley desde 2010, incluido los Thorns, por lo que su historia de abuso abarca más de una década, por este motivo se siente agradecida de toda la validación que ha recibido mundialmente.

 

«Sentí que le había dado un propósito a mi dolor, y eso ha sido una liberación para mí que no he podido sentir durante 10 años (…) Quiero más justicia, quiero mejores políticas, quiero que los jugadores estén protegidos», declaró en entrevista para Today.

 

Entre las fuertes historias que se han compartido acerca de los abusos del entrenador destaca una donde Farrelly y Shum fueron obligadas a tener relaciones con el entrenador y  besarse para evitar que el equipo tuviera que realizar un ejercicio de acondicionamiento.

Por su parte Shim denunció a Riley en 2015 siendo parte del equipo Thorns, los funcionarios anunciaron que el contrato de este no se renovaría, pero no fue hasta esta fechas cuando el entrenador fue despedido además de que su licencia fue cancelada.

 

«Es un depredador. Me acosó sexualmente, coaccionó sexualmente a Sinead y nos quitó nuestras carreras. Desde el principio, hubo una posesión no solo de Paul sino del equipo para el que jugaba. Me silenciaron por múltiples problemas, siendo mi sexualidad el más importante, y sí, estaba muy, muy incómoda el todo el tiempo», mencionó Shim en entrevista para TODAY.

 

Por su parte, el ha calificado como falsas las acusaciones y aseveró jamás haber sostenido relaciones o acercamientos sexuales con las jugadoras.

 

¿Qué ha pasado?

 

En primera instancia hubo una suspensión de los partidos por parte de la ahora destituida  comisionada de la NWSL, Lisa Baird, quien momentos antes de ser removida tras acusaciones de no haber realizado un buen papel en su cargo e ignorar quejas y denuncias, declaró un paro en las actividades.

«Asumo toda la responsabilidad por el papel que he desempeñado. Lamento mucho el dolor que muchos están sintiendo. Reconociendo ese trauma, hemos decidido no salir al campo este fin de semana para darles a todos un espacio para reflexionar. El negocio como de costumbre no es nuestra preocupación en este momento. Toda nuestra liga tiene mucho que curar», apuntó.

 

Posterior a estos, la NWSLPA (el sindicato de las jugadoras), dio a conocer que reanudarían actividades el miércoles pasado y comenzó tenencia en Twitter con #NoMoreSilence.

 

«Reconocemos que no procesaremos el dolor de los últimos días en un fin de semana o una semana. En medio de las declaraciones que las ligas y los clubes se lanzan rápidamente, nos hemos estado escuchando a nosotros mismos ya los demás», escribieron en su comunicado.

 

 Juntas

 

Después de esto un gran número de jugadoras de la liga ha pronunciado su total apoyo a afectadas, realizando publicaciones en Twitter y también llevando la solidaridad a la cancha.

 

 

El miércoles 7 de octubre, durante la reanudación de actividades el el juego entre el Washington Spirit y el Gotham FC, las jugadoras hicieron efectivo el llamado realizado por su sindicato.

«Los equipos dejarán de jugar en cada uno de los partidos de esta noche a los 6 minutos. Las jugadoras se unirán en solidaridad en el círculo central durante un minuto en reconocimiento a los 6 años que les llevó a Mana, Sinead y a todas las que lucharon durante tanto tiempo para ser escuchadas” , proclamaba la publicación.

 

Esto solo es el primer paso para romper el silencio que ha envuelto al fútbol femenil. La FIFA anunció que los órganos judiciales ya han abierto una investigación.

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¿Un asunto sistémico?

 

Por su parte y durante esta semana, la Selección femenina venezolana hizo de conocimiento público los abusos sexuales, físicos y psicológicos, infligidos por el exentrenador de la Vinotinto, Kenneth Zseremeta. La carta está firmada por 24 jugadoras.

 

“Desde el año 2013 hasta el año 2017 surgieron numerosos incidentes alrededor de la figura del entrenador Zseremeta (…) muchas de nosotras seguimos con traumas y heridas mentales que nos acompañan en nuestro día a día”, se lee en el comunicado.

Integrantes de la liga estadounidense se han pronunciado en apoyo de esta selección y han apuntado que se trata de un problema sistemático. 

“Protejan a las jugadoras. Crean en los jugadores. Esto es un abuso sistémico en el mundo. Gracias por tu valentía. Tú mereces más”, escribió la jugadora de Thorns Meghan Klingenberg.

 

Por el momento la US Soccer, autoridad que no solo gobierna el fútbol en el país, sino que también apoya financieramente a la NWSL ha prometido investigar a fondo lo ocurrido en Estados Unidos. 

«Nos tomamos en serio nuestra responsabilidad de investigar enérgicamente el comportamiento abominable que se ha informado y obtener una comprensión plena y franca de los factores que permitieron que sucediera» pronunciaron en un comunicado.

 

Se espera que en los siguientes días salgan a  luz más declaraciones, pues el movimiento que han empezado las futbolistas busca romper el silencio y ofrecer un lugar en deporte seguro para cada jugadora.

GR

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