No hizo falta que el gobernador Miguel Barbosa hiciera una referencia al nombre y apellido de quienes estarían detrás de la trama del pase de charola a presidentes municipales de militancia priista, como fue relatado en la más reciente entrega de la Parabólica.

Los nombres de Ignacio Mier Velazco, Enrique Doger Guerrero, Javier Casique Zárate y Jonathan Collantes invadieron el imaginario colectivo cuando Barbosa preguntó: ¿quién de la dirección estatal del PRI estaba ahí? ¿Quién es el gran político priista que ahí definía cosas?, y ¿Quién es el gran socio de ese gran político priista?.

Será la autoridad la que investigue, a instancias del encargado del despacho de la Auditoría Superior del Estado, Ruben de la Fuente Vélez refirió la mañana de lunes en su conferencia mañanera el inquilino de Casa Aguayo, adversario en la campaña de 2018 de ese “gran político priista” que definía cosas.

La punta del iceberg de la trama fue el edil de Cuetzalan, Gerson Calixto Dattoli, como se narró en la entrega de la columna de este mismo lunes (https://parabolica.mx/2021/columnas/parabolica/item/18401-mintio-robo-y-traiciono), pero podrían haber muchos más.

Una fuente bien acreditada contó al reportero que uno a uno, los presidentes municipales fueron llamados para que compartieran información de la manera en que recibieron presiones políticas para el pago en efectivo a cambio de librar las cuentas públicas de sus administraciones y según la cual, el monto total podría alcanza los 170 millones de pesos en el breve periodo en el que se mantuvo al frente Francisco José N.

“No quiero dar nombres pero me está pareciendo muy lógico en esa trama de la política sucia” en la que se presume, el contador del grupo, según se desprende de diversas hipótesis, fue el ex auditor superior, destituido la semana previa y sobre quien pesan imputaciones más graves que la de sólo violencia familiar.

Mucho tacto deberá tener el personal de la Fiscalía General del Estado, bajo la tutela de Gilberto Higuera Bernal, sembrada como ha estado la dependencia de gente que sigue a disposición de personajes del pasado y del presente, ajenos o contrarios a la voluntad de erradicar corruptelas y compadrazgos.

Ya en otras averiguaciones hubo fuga de información, desaparición de documentos probatorios notariados para retrasar los procesos.

Ahí está la directora de Administración eran la Oficialía Mayor de la Fiscalía General del Estado, Huri Verónica Herrera Corichi, esposa del secretario particular de Javier Casique Zárate, Omar Luna Soriano.

Evitar filtraciones de lo que podría ser la indagatoria más robusta luego de la efectuada que permitió la captura de Eukid N., en marzo de 2020 será preciso para cerrar el paso al fracaso de los esfuerzos institucionales.

En julio de 2020 el periodista Alfonso Ponce de León, fallecido recientemente, consignó el proceso que tuvieron abierto por la vía civil (1046/2019) Huri Verónica Herrera Corichi y el cercano a Casique por un presunto fraude cometido en agravio del Fovissste.

 

@FerMaldonadoMX

parabolica.mx escribe Fernando Maldonado