El temible líder delincuencial que desde Texmelucan pretendió constituir una célula del Cártel de Jalisco Nueva Generación, Óscar El Loco Téllez, deberá purgar una sentencia de más de 23 años de prisión por la ejecución de un integrante de su pandilla en 2020.

Si los recursos de impugnación de la sentencia obtenida por la Fiscalía General del Estado se mantienen firme, deberá abandonar el penal con más de 70 años de edad, en el ocaso de su violenta existencia.

En 2018 un grupo de empresarios y comerciantes de la región acusaron complicidad de las autoridades cuando fueron citados a Casa Aguayo, con Fernando Manzanilla como Secretario General de Gobierno.

Se les pidió a cada uno de los convocados escribir en una hoja de papel, de puño y letra describir todo lo que sabían del delincuente que se había dado el lujo de poseer animales exóticos en una de sus propiedades en aquel municipio.

Todos los convocados se levantaron de la mesa y se marcharon por la certeza de que ahí se les tendía una trampa. Convertirse en blancos visibles de un criminal que creció al amparo del gobierno de Rafael Moreno Valle, entre 2016 y 2018.

Tres zonas de influencia permitió al recién condenado a más de dos décadas de encierro construir una base social para evitar ser detenido en al menos el primer año del nuevo gobierno de Miguel Barbosa, en 2019.

El Arenal, La Purísima y Tepatlaxco, fueron perímetros en los que El Loco Téllez se movió con soltura, junto a sus sicarios y cómplices… Hasta que la administración de la que recibió apoyo consistente en disimulos de persecución, se extinguió.

En 2020 tuvo que huir y como sucede con los grandes capos, fue detenido en el intento de encontrar refugio en las faldas de una jovencita de unos 22 años de edad en una calle sin salida en las inmediaciones de la empresa Rhom and Hass, en el municipio de Apizaco.

Al Loco Téllez se le vinculó primero con el delito de robo de hidrocarburos de los ductos de Petróleos Mexicanos en toda la zona de San Martín Texmelucan y luego diversificó sus actividades criminarles como el cobro del derecho de piso y la ejecución de integrantes de grupos rivales.

Casi ninguna actividad lícita en los alrededores de Texmelucan estuvieron ajenas a la influencia del Loco Téllez. En una ocasión empresario que pretendió colocar una empresa de reciclaje de autopartes en ese municipio tuvo que acudir al delincuente para que se le permitiera desarrollar actividades productivas, narró al autor de la columna el propio empresario.

En julio de 2020 se descubrió la existencia de un túnel de 180 metros de longitud que conectaba a cuatro tomas de gas LP y un predio, construido por la banda de Loco Téllez.

Eso demostraba la capacidad logística y económica de este criminal. El ex presidente de la Asociación de Empresas de la Construcción, Sergio Curro dijo que para poder desarrollar esa obra clandestina se debieron tener conocimientos de geotécnica y geología, además del reto que supone evitar correr riesgos como la existencia de bióxido de carbono.

Un pasadizo de 180 metros de longitud y 80 centímetros de diámetro debieron requerir unos cuatro meses, lapso en que ninguna autoridad frenó los afanes criminales del personaje para el que se le impusieron más de dos décadas de prisión.

 

@FerMaldonadoMX