Innegablemente vivimos en tiempos de afecto al capitalismo, cuya proliferación encontró un caudal en las tecnologías de ocio y de comunicación que disfrazan sus retóricas engañosas de la liberación y la democratización en herramientas de poder implícito sigiloso y casi invisible, y utiliza la ecología del medio para la reproducción aletargada del pensamientos de mentes alienadas, bien llamadas “virales”, pues enferman y encarnan formas no verbales de estandarización que se distribuyen contagiosamente por la web.

A comienzos del 2021, comenzó a hablarse del deepfake mayormente cuando un usuario en TikTok consiguió animar una imagen de Tom Cruise con el uso de la tecnología deepfake. Luego, creadores de Unreal Engine presentaron la herramienta MetaHuman para la creación de avatares fotorrealistas.

La sociedad red se basa en la distribución de anatomías sensoriales estandarizadas que se reproducen en un tipo de sujeto abstracto, y que con la tecnología le dan cuerpo y forma a la ficción humanista del sujeto; es decir, en medida que compartimos encuadres, distancias y focos, así lo hacemos con la ficción de una realidad universal, dice Castells.

La cultura digital llegó al punto de la obsesión por la simulación y la visualización que representa una discreta porción de la realidad, como en el caso del metaverso, que se trata de esfuerzos por controlar universos irreductibles bajo el equivocado fundamento de que toda realidad puede reducirse a información, pero lo que se reduce son pequeños fragmentos de la realidad que son sometidos a performáticas de producción del conocimiento.

El youtuber Ralph Virtual recientemente acaba de mostrar cómo a partir de Unreal Engine 5 y la base de Tom Cruise, creó una réplica muy realista del actor, ahora metahumano, a través de la sustitución de cara, gestos, perspectiva, iluminación y expresiones faciales parecidas al actor que abre un nuevo camino al deep fake.

La tecnología apunta hacia el metahumano, un humano potencial, jamás definido por completo, una presencia sin identidad que no está constituido bajo la abstracción mental ni la condición de exterioridad con el mundo.

La finalidad del deep fake con Tom Cruise, al menos en un inicio, es mejorar la calidad de las imágenes en los videojuegos; sin embargo, no se pueden descargar otras finalidades que inducen a procesos de sometimiento en la lógica económica y del mercado en las que cada vez adquiera un valor mesurable y abona a los mecanismos performativos de producción de la identidad.

 

@cm_ramoslinares