Los bombardeos rusos de esta semana con drones dejaron más que daños materiales y generaron un apagón en diversas zonas de Ucrania, pues las centrales eléctricas fueron el objetivo de los recientes ataques y que impactan ante la llegada del invierno.

Las autoridades ucranianas reportan daños en 30% de las centrales, lo que dejó a miles sin luz. Ante ello, llamaron a la sociedad a racionalizar el uso de la energía.

Advirtieron que la estrategia puede provocar un nuevo éxodo de ucranianos hacia el bloque comunitario, dijo el mandatario, instando a los países europeos a suministrar a Kiev defensas antiaéreas más sofisticadas.

El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, instó a la población, las empresas y los comercios a “ahorrar al máximo” el consumo de iluminación y publicidad.

“Incluso los pequeños ahorros de cada hogar van a ayudar a estabilizar el sistema energético del país”, dijo.

En la segunda ciudad más grande de Ucrania, Járkov (noreste), bombardeada durante meses, el operador del metro anunció que aumentaría los intervalos entre los trenes para ahorrar electricidad.

Sanciones por drones iraníes

Los aliados occidentales, frente a las supuestas entregas de armas de Irán a Rusia, adoptaron una serie de penalizaciones contra Teherán.

La Unión Europea (UE) impuso el jueves sanciones a tres generales iraníes y a una empresa acusada de suministrar estas armas. El Reino Unido se sumó a esas medidas.

“Esta es nuestra clara respuesta al régimen iraní que proporciona a Rusia drones usados para asesinar a ciudadanos ucranianos inocentes”, dijo el primer ministro checo, Petr Fiala.

Ucrania se congratuló por la “rápida” reacción del bloque. Moscú, en cambio, acusó a los países occidentales de querer “presionar” a Irán.

Bielorrusia, fronterizo con Ucrania y aliado de Rusia, está incrementando su papel en el conflicto, especialmente desde que la semana pasada anunció una fuerza conjunta con Moscú.

Las autoridades ucranianas indicaron que veían un riesgo “creciente” de que Rusia abra otro frente desde Bielorrusia, cuyo territorio ya sirvió de base a las tropas rusas cuando se inició la invasión de Ucrania, a finales de febrero.

Deportación masiva

El presidente Vladimir Putin impuso el miércoles la ley marcial en los cuatro territorios ucranianos que ordenó anexionar a Rusia: Donetsk y Lugansk (en el este) y Zaporiyia y Jersón (sur).

En Jersón, las autoridades prorrusas ordenaron la evacuación de la región, ante la presión de la contraofensiva ucraniana.

Ayer 15 mil personas habían sido trasladadas a la otra orilla del río Dniéper, que rodea la ciudad Jersón, capital de la región homónima.

El gobierno de Ucrania acusó a Rusia de haber minado una represa del sur e impuso restricciones energéticas a la población para paliar el impacto de los bombardeos rusos que destruyeron casi un tercio de las centrales eléctricas del país antes de la llegada del invierno.