Si la métrica no falla, a finales de este 2022 unas más de 106 mil personas habrán visto y escuchado en algún momento las conferencias de prensa que todos los días hábiles de la semana ofrece el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa.

Se trata de la confirmación de que el fenómeno viral en tiempos de la Cuarta Transformación ha sido uno de los instrumentos de comunicación política más efectivos, pero inexplorados aún por los estudiosos.

El modelo de comunicación fue instaurado por Andrés Manuel López Obrador entre diciembre del 2000 y junio de 2005, cuando fue Jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal.

Tan efectivas eran esas conferencias de prensa que el tabasqueño que salía al podio conseguía poner los temas de agenda en el país, frente al inmovilismo desorientado de Vicente Fox Quezada, el panista que había ganado la presidencia, pero perdido la batalla de la opinión pública.

Sin distingo de las líneas editoriales de cada uno de los medios masivos como radio, televisión y prensa escrita (en el inicio del nuevo siglo era aún incipiente el uso de internet y las redes sociales, prácticamente inexistentes) colocaron en sus principales espacios los mensajes de este político del trópico tabasqueño poco ortodoxo.

En el caso poblano es probable que Barbosa sea el único gobernador que ha seguido con sus conferencias de prensa mañaneras, con lo que ha conseguido igualmente colocar los asuntos públicos en donde mejor ha convenido.

Del universo de usuarios de redes sociales que asisten en las mañanas a la exposición virtual desde Casa Aguayo, dice un análisis de sentimiento en la métrica digital, un 89 por ciento muestra una actitud neutra, cuatro por ciento es positivo y un 7 por ciento mostró una posición negativa.

Como quiera que sea, el poblano ha conseguido lo que ningún otro gobernador en la historia de Puebla con esa férrea disciplina matutina: convertir sus conferencias de prensa en una bocina estentórea de la que toda personas interesada en la vida pública debe poner atención.

El ejercicio comenzó como un instrumento para informar de las políticas de contención del Coronavirus en marzo de 2020, así como de sus funestas consecuencias.

En el primer año de pandemia el gobernador habrá ofrecido unas 196 conferencias en las que junto con su gabinete daban cuenta de ese difícil periodo por el que todos atravesaron.

Ya para 2021 y 2022, cada uno de esos años fueron alrededor de 250 exposiciones a medios en los que, como ocurre aún en nuestros días, los integrantes del gabinete en Salud y Gobernación, fundamentalmente, ofrecen un parte y luego viene la ronda de preguntas y respuestas.

Quienes las hemos seguido dese sus inicios hemos visto desfilar un número notable de funcionarios que terminaron por tirar la toalla, cesados o renunciantes.

Por los números que muestra la pandemia en este mes de octubre, con números extraordinariamente conservadores, es probable que la numeralia de nuevos casos, hospitalizados y decesos deje de ser insumo principal en los medios de información por la reducción de todas las variables.

Las mañaneras, debemos asumir, seguirán porque con solvencia, han demostrado ser el modelo que permite transmitir mensajes, fijar posiciones y acotar a grupos de interés ajenos al espíritu que mueve a la izquierda.

 

@FerMaldonadoMX