El dictamen que expide la Ley de Ingresos para 2023, que estima una recaudación 8.3 billones de pesos y un endeudamiento interno de 1.1 billones de pesos se aprobó esta mañana con 271 votos a favor de la coalición Juntos Hacemos Historia (Morena-PT-PVEM) y recibió 201 votos en contra del PAN, PRI, PRD y MC, además de una abstención.
La Asamblea aceptó, luego de casi 18 horas que duró la sesión, agregar un artículo transitorio y una adición al artículo 16 del proyecto de decreto.
La reserva propuesta por la diputada Martha Alicia Arreola Martínez (Morena) para adicionar un Transitorio fue respecto a la regularización de autos usados de procedencia extranjera.
La diputada explicó que los subsidios federales derivados de los ingresos que se obtengan por este programa y que se hayan generado en 2022 se podrán comprometer, devengar y pagar, por parte de los municipios, durante el ejercicio fiscal 2023.
Detalló la regularización de vehículos usados de procedencia extranjera, promulgado a principios de 2022, ha puesto en regla 600 mil unidades, y se han obtenido mil 394 millones de pesos, que se destinarán para pavimentación de 14 municipios que acceden a este programa.
La otra reserva aceptada la presentó el diputado Azael Santiago Chepi (Morena) para adicionar una fracción al artículo 16 y con ello otorgar un estímulo fiscal a las personas físicas y morales residentes en México que enajenen libros, periódicos y revistas, cuyos ingresos totales en el ejercicio inmediato anterior no hayan excedido los seis millones de pesos.
La principal crítica que hizo la oposición al dictamen fue que se sustenta en cifras que no se apegan a la realidad, por lo que existen riesgos de que no se alcance lo estimado en recaudación y el gobierno se vea obligado a endeudarse más o aplicar mayores recortes al gasto.
El diputado Mario Riestra (PAN) aseguró que con la Ley de Ingresos se corre el riesgo de una crisis financiera de fin de sexenio.
Explicó que la estimación del crecimiento económico que realizo la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) fue realizada sin sustento alguno y si se confirma un crecimiento económico del 1.5% significaría una recaudación menor en 78 mil millones de pesos que obligará al Gobierno a subsanarlo con recortes presupuestales o con más deuda.
“Banco de México, Citibanamex, el Fondo Monetario Internacional, la OCDE, todos estiman un crecimiento económico mucho más modesto para la economía mexicana, la mitad de lo estipulado por las cifras alegres del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O”, apuntó.
Expresó que en caso de que no se alcance el crecimiento económico planteado se caerá la recaudación y es de esperarse un déficit superior al 5% del PIB.
“Ramírez de la O usa premisas fantásticas de crecimiento e inflación. No hay un solo economista serio que valide los datos del secretario de Hacienda. Algunos estudios confirman que jamás nadie se había atrevido a sobreestimar tanto el crecimiento económico como lo ha hecho él”, mención Riestra Piña.
Por su parte, el grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) acusó que los 8.3 billones de pesos que se recaudarán serán destinados para caprichos del presidente López Obrador y no para cubrir las necesidades que tiene el país.
El diputado Marcelino Castañeda (PRI) aseveró que la Ley maneja estimaciones sin sustento y fue diseñado de forma irresponsable.
Lamentó que el Ejecutivo y la bancada morenista mientan a la ciudadanía diciendo que “pronto” habrá una recuperación económica, cuando en los hechos no se apuesta por una urgente reactivación económica, sino que se mantiene la consigna de defender los caprichos de los megaproyectos del presidente, cueste lo que cueste.
Por su parte, el diputado Daniel Gutiérrez afirmó que la Ley de Ingreses mantiene la estabilidad y solidez de las finanzas públicas, al tiempo que se garantizan los recursos para fortalecer los programas sociales y los grandes proyectos nacionales, sin descuidar el desarrollo, el empleo y el bienestar de la población.
Insistió en que el dictamen establece un marco legal responsable y realista, que reactiva la actividad económica, y mantiene la disciplina fiscal, lo cual generará mejores condiciones de ingreso para el país.