El resultado del más reciente estudio de la empresa MassiveCaller, sobre el proceso para elegir candidaturas a gobernadora o gobernador en Puebla, planteó nuevos escenarios, con otros perfiles a quienes se les veía con nula o escasa probabilidad, aún y cuando el proceso comenzará formalmente exactamente dentro de un año.
Nombres que por la brega diaria, por trayectoria o responsabilidad del momento están en el imaginario; otros que se ubican en donde deben estar, en el sótano de la encuesta, como ya se ha visto en otras mediciones.
El estudio demoscópico fue levantado el primer día del mes de enero mediante la técnica de robot a través de llamadas telefónicas, y aunque sus resultados son vistos de soslayo por especialistas en el estudio de mercados de opinión, no deja de plantear dudas y confirmar certezas en materia comicial.
Basta mencionar que del resultado de esa encuesta podría encontrarse que en el inicio del premonitorio 2023 las tres principales fuerzas políticas tendrían perfiles sólidos y con solvencia política para competir en las urnas el primer domingo de junio del próximo año.
Ahí están, en primer término, el edil de la capital por el Partido Acción Nacional, Eduardo Rivera Pérez; por el Movimiento de Regeneración Nacional, Alejandro Armenta Mier; y por el Revolucionario Institucional, Blanca Alcalá Ruiz.
MassiveCaller consultó ¿quién le gustaría que fuera candidato a gobernador?, cuya vitrina metodológica se basó en mil cuestionarios y su grado de confiabilidad descansa en un margen de error de 3.4 por ciento +/-.
El resultado no admite duda, pues el panista Rivera Pérez tiene un 51.4 por ciento y le sigue a la distancia la diputada federal, Ana Teresa Aranda con 24.3 por ciento.
En el PRI se prefiera a la vicecoordinadora del grupo legislativo de esa bancada en San Lázaro, expresidenta municipal y quien ya contendió por la gubernatura, Alcalá Ruiz, con un 38 por ciento, mientras que al coordinador de los priistas en el Congreso local lo preferiría un 28 por ciento.
En el partido en el poder, un 26.5 por ciento votó por el presidente del Senado de la República, Alejandro Armenta; y aunque la expresidenta municipal, Claudia Rivera Vivanco, aparece con 19 puntos, habrá que poner la mirada en el coordinador de los diputados federales, Ignacio Mier Velazco, quien, literal, araña un 10 por ciento.
Mier Velazco es, a todas luces, la carta con la que el grandilocuente Mario Delgado pretende jugar en el proceso en curso, pero con el menor rango de conocimiento y aceptación, vinculado además con los grupos que notoriamente ha combatido el discurso de Andrés Manuel López Obrador.
El escenario que plantea el estudio demoscópico de la firma encuestadora deberá ser actualizado con el paso de los meses a la luz de los reacomodos en el tablero partidario.
Morena en Puebla posee una holgada ventaja en materia de preferencia electoral con 49.8 por ciento; Acción Nacional, 26.8; y el tricolor un agonizante 6.4 por ciento, pero igual habrá que esperar la nueva configuración del tablero, resultado de los procesos de este 2023 en Estado de México y Coahuila.
parabolica.mx
Fernando Maldonado