Rusia y China firmaron un acuerdo estratégico para entrar en una “nueva era” en sus relaciones y destacaron su identidad de posturas frente a las potencias de Occidente, que intentan aislar a Rusia a causa de la guerra de Ucrania y aumentar su presencia en Asia.
“Hemos firmado una declaración que refuerza nuestra asociación estratégica y nuestras relaciones que entran en una nueva era”, declaró el presidente chino Xi Jinping, tras reunirse en Moscú con su par ruso, Vladimir Putin.
Putin expresó un apoyo prudente a las propuestas chinas para encontrar una solución negociada al conflicto en Ucrania, que se inició hace casi trece meses con la invasión de tropas rusas en ese país.
“Numerosos puntos del plan de paz propuesto por China (…) pueden servir de base para una solución pacífica, cuando Occidente y Kiev estén dispuestos a ello. Pero no vemos por el momento disposición por su parte”, declaró el mandatario ruso.
En respuesta, Estados Unidos, aseguró que no ve a China como un mediador “imparcial” entre Moscú y Kiev, mientras el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, invitó a Jinping a dialogar, petición que aún espera “una respuesta”, según el mandatario.
ACUERDO ENERGÉTICO
La declaración de Moscú destaca que Rusia y China “están muy preocupadas por el creciente refuerzo de los vínculos entre la OTAN y los países de la región Asia-Pacífico en relación a cuestiones militares y de seguridad” y acusan a la Alianza Atlántica de “socavar la paz y la estabilidad regionales”.
Después del encuentro con Xi, Putin también anunció que ambos países alcanzaron un acuerdo para construir un gigantesco gasoducto que llevará gas de la región siberiana hasta el noroeste de China, un proyecto conocido como Fuerza de Siberia 2.
Según el presidente ruso, cuando el ducto entre en servicio podrá encaminar “50 mil millones de metros cúbicos de gas” hacia el gigante asiático. Rusia, bajo sanciones occidentales por la ofensiva en Ucrania, quiere orientar su producción de hidrocarburos y la demanda de energía del gigante asiático, segunda economía mundial, parece ofrecer inmejorables perspectivas.