24 Horas Puebla

¿Cómo decirle a un periodista convertido en matraquero que la única línea es que no hay línea, que no ha caído la “pinche señal” ?, o bueno, para que nos entiendan, en qué lenguaje le comunicamos a los periodistas metidos a voceros que aún no hay candidato a gobernador:

  1. ¿Tatanka, búfalo?
  2. ¿Amino guana, amino guana?
  3. En lenguaje de señas
  4. Todas las anteriores

Si marcó la opción (a) está en lo correcto.

Si marcó la opción (b) también.

Si su dedo apuntó a la (c) quiero decirle que usted es brillante. ¿Qué bárbaro?

Y si dijo que todas las anteriores, pues qué le puedo decir, su IQ está por encima de lo normal.

Tanto Ignacio Mier como Alejandro Armenta, Claudia Rivera, Julio Huerta y Olivia Salomón juegan a una sola cosa: a que en nuestra aldea les creamos que son ellos los buenos para 2024.

Apuestan a la percepción social para subir en los números. A que la bufalada se sume. A crear la famosa cargada.

¿Ya es alguno de ellos?

No.

Puede salir entre alguno de ellos: sí. Aunque en nuestra íntima intimidad nos guste o no, pero todos juegan, todos tienen posibilidades de obtener la candidatura.

No hay señal, puede salir entre ellos o llegar incluso un personaje como Rodrigo Abdala que apacigüe y no genera confrontaciones ni amenazas ni boquetes por posibles berrinches venideros de quienes no estén de acuerdo con la decisión final.

Aclaramos lo siguiente, tampoco aseguramos que Abdala sea.

¿Quiénes intervendrán en la elección del candidato a gobernador? Pues como nunca dejamos el sistema presidencialista será el inquilino de Palacio Nacional, en primer lugar junto con la candidata a la presidencia de la República, la opinión bien ganada del gobernador de Puebla y al final, pero muy al final, los resultados de las encuestas.

Por qué es necesario señalarlo, porque hay grupos, periodistas militantes o activistas que piensan de forma ilusa que esto se decide aquí en Puebla y generan ansiedad donde no debe existir.

El primero que sabrá el caso Puebla será el gobernador que ha sido extremadamente prudente y si él ha dicho que hay piso parejo para todos y lo ha demostrado, será él quien al final cante las Palabras Mayores.

Primero lo primero: la elección del Estado de México. Si Delfina Gómez gana por una diferencia mayor a cinco puntos, será más fácil tomar decisiones del sucesor. Si gana por menos o pierde, entonces, las reglas y las estrategias cambiarán.

Segundo, derivado de lo anterior nombrar a la candidata la Presidencia con todo el respaldo de los gobernadores de Morena. Se cerrarán filas para evitar fisuras y la operación cicatriz.

Tercero, ahora sí, vamos entidad por entidad.

Así que si ya andaba pintando sus bardas o sacando sus mantas, espérese, no se equivoque, que en Puebla el único interlocutor real con Palacio Nacional es Sergio Salomón Céspedes Peregrina.

Ha sido notorio  cómo le abrieron las puertas en Palacio Nacional, ahí está el caso del boquete financiero de 2 mil 600 millones de pesos y que al final le regresaron el 75 por ciento de lo pagado al SAT.

Si llegado a este punto, mañana el vocero del vocero del candidato sigue en la misma, entonces, ya no hay más que decir. Haga lo que le dé su regalada gana.

El problema de dichos periodistas es que no juegan a informar sino a ser los favoritos del régimen que venga.

O sea unos tristes matraqueros.