El decreto que lanzó el Gobierno de México para impulsar el nearshoring se queda corto y hace falta una estrategia de mayor alcance para concretar la llegada de inversiones extranjeras al país, alertó el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
No se pone en duda la importancia de otorgar estímulos fiscales a nuevas empresas que busquen instalarse en el país, pero siguen haciendo falta instrumentos de acuerdo al tamaño de las necesidades de las distintas industrias que podría crecer en nuestro territorio, señaló Nataly Hernández, investigadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del IMCO.
Comentó que México está esperando la llegada de empresas que vienen de Asia para estar más cerca de la región, pero hace falta mucha infraestructura en energía eléctrica, resolver la escasez de agua en algunas partes del país como en el norte y además que urge actualizar o desarrollar el talento de la mano de obra hacia las nuevas tecnologías que se desarrollan por ejemplo en inteligencia artificial.
La investigadora puntualizó que se debe dar certidumbre y un estado de derecho claro en reglas y normas para que las posibles nuevas empresas que busquen relocalizarse vean que contarán con certeza jurídica de acuerdo a las normas no sólo del T-MEC, sino también en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
“Un tema con el decreto tal como se publicó es que está enfocado solo a 10 sectores en particular y esto pierde margen de competitividad para diversas entidades, porque al enfocarse en industrias específicas como la automotriz se apuntala sólo al centro y norte de la República en algunos casos y se olvidan otras regiones”.
Hernández insistió que por muchos estímulos fiscales que se otorguen, continúan latentes muchos obstáculos, ya que hay varias regiones que no cuentan con la electricidad suficiente, el agua suficiente o las vías terrestres en las condiciones necesarias como carreteras.
Argumentó que México cuenta con un potencial enorme y grandes atractivos pero sólo en determinadas regiones y un gran capital humano, pero dijo que la estrategia debe ser más robusta para no perder la oportunidad de concretar la atracción de la inversión de empresas foráneas y desaprovechar el momento.
Indicó que al momento pareciera que sólo el norte del país en Monterrey y regiones del centro como la CDMX están pudiendo ofertar parte de la infraestructura que se requiere. Reconoció que tanto Economía como la Secretaría de Hacienda han planteado hacer los ajustes necesarios para impulsar la relocalización de firmas en el país, pero no sólo es una posición es hacer los ajustes para no afectar tanto a las empresas como al gobierno. “Se puede entrar en conflicto con acuerdos que tiene México con la Organización Mundial de Comercio y es que en particular te decía tal como está planteado el decreto lo que hicieron ahora es que se están dirigiendo
beneficios únicamente a empresas exportadoras en 10 sectores con vínculos comerciales principalmente con EU, esto contradice algunas leyes anticompetitivas internacionales”.
El decreto así como está escrito, abundó contraviene por lo menos para empezar el artículo del Acuerdo General de Aranceles y Comercio de la OMC porque ahí dice claramente que si un país concede una ventaja a otro nación como estímulos genera conflicto de interés y prácticas monopólicas.
Este 11 de octubre México publicó un decreto en el Diario Oficial para otorgar estímulos fiscales a 10 sectores de la industria exportadora. Los estímulos consisten en deducciones hasta 50% de impuestos.