Al convocar a la reunión con los siete aspirantes a la coordinación estatal de la Defensa de la 4T, el gobernador Sergio Salomón Céspedes se ha convertido en el garante del proceso.
Dicho de otra forma, ha convertido en su responsabilidad personal que, en Puebla, sea cual sea el resultado, no surja un Marcelo Ebrard que empañe 2024 o, mucho menos, ponga el riesgo los resultados electorales.
Sin duda no será una tarea fácil, pero, con su muy particular estilo de gobernar, Sergio Salomón Céspedes seguramente ya tiene bastante bien perfilado lo que pasará con los seis que queden fuera.
De ese grupo saldrán senadores, diputados federales y en una de esas, hasta alcaldes. El chiste es que nadie quede fuera porque la elección que viene será todo, menos sencilla. Puebla es una entidad muy importante en la aportación de sufragios, eso lo sabe Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum y por supuesto el gobernador Céspedes Peregrina.
La reunión no fue para salir sonrientes en la foto o mostrar que todos son amiguitos, la reunión fue para poner los puntos sobre las íes, insisto, garantizar que Puebla no será un dolor de cabeza en Palacio Nacional, ni en para la cuasi candidata de Morena a la presidencia de la República.
Me parece también que el destape de este domingo de Eduardo Rivera mandó un mensaje muy claro, va con todo, con la certeza que 2024 no será un juego de canicas, por tanto, en el bloque de enfrente las alertas están encendidas. Y no hay más camino que la madurez política para enfrentarlo con la misma fuerza.
Una muestra muy clara son los mensajes que mandaron a Eduardo Rivera Olivia Salomón, Nacho Mier, Armenta y el propio gobernador. “Hay tiro” y lo saben todos.
Ya se verá en cosa de dos semanas si la reunión de este domingo surtió efecto. Otro camino no tienen y, especialmente, el gobernador se convirtió en el garante y no por juego.
Me encuentran en X como @jesibalta

