Tras 9 meses de distanciamiento, el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió con las madres y padres de los 43 Normalistas de Ayotzinapa, a que la próxima mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum dé seguimiento al caso.
Así lo dio a conocer Vidulfo Rosales, abogado de los familiares de los jóvenes desaparecidos la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014, tras su reunión de poco más de 2 horas con el titular del Ejecutivo en Palacio Nacional.
A la salida del encuentro, el representante legal de las madres y padres dijo que en este encuentro no hubo avances con respecto a la investigación pero que se pactó un nuevo encuentro para el 3 de julio, además de que, en caso de continuar el diálogo, en una de las reuniones:
“Él se compromete a que la próxima Presidenta pueda darle seguimiento al caso Ayotzinapa. Por lo medular, compañeros y compañeras, del caso, los avances que hoy se nos presentaron, a juicio de nosotros, no se está presentando ningún avance”.
Esto, porque Rosales Sierra señaló que no se le dio respuesta puntual a la petición de los folios de información de la Defensa que podrían contener indicios sobre el caso, además de que, aunque se les informó sobre 250 búsquedas en campo “no tenemos hoy en día una sola identificación que corresponda a los estudiantes, no hay avances sustantivos”.
Calidad de los procesos
Además, en lo que respecta a los procesos contra los presuntos implicados en el caso, y que en días recientes sufrieron un revés, pues se les cambió la medida cautelar a 8 militares que enfrentan los presuntos delitos de desaparición forzada y delincuencia organizada, el abogado dijo que lejos de lograr victorias sólo se anotan derrotas.
También lamentó que las extradiciones de personajes claves, como José Ulises Bernabé, juez de barandillas en Iguala, Guerrero, sitio en el que habrían desaparecido 17 de los 43 jóvenes, tampoco avanza.
Por ello, Vidulfo Rosales consideró que en este caso el presidente López Obrador está inmiscuyendo un tema de carácter político en la reunión:
“A juicio de un servidor, creo que los padres también comparten esta apreciación, que 70 por ciento de la intervención del Presidente alude a lo que él llama lo que se obstaculizó la investigación (…),
“(…) porque tanto el Grupo de Expertos se opuso a la detención o al ejercicio de la acción penal contra Murillo Karam, como los abogados celebramos nosotros la famosa sentencia de Reynosa Tamaulipas, en la que simulamos nosotros la observación de los derechos humanos”.
Además, aprovechó para destacar que el Presidente lo acusa de:
“Haber tirado la puerta del palacio presidencial y de haber arengando para que hubiera un boicot contra la campaña de Claudia Sheinbaum, sin darnos la oportunidad del Presidente de que pudiéramos responder en la mesa a esos señalamientos”.
La tónica de la reunión, según el relato del abogado, sigue la misma línea que el mandatario dibujó el 25 de marzo, de que los padres estarían manipulados, así como las investigaciones:
“Tenemos sospechas de que hubo acuerdos políticos, incluso que utilizaron o participaron conscientemente organismos de derechos humanos, y los mismos abogados de los papás de los muchachos”.
Por lo que aprovechó para reiterar que la sentencia mediante la que fueron liberados decenas de implicados en el caso hace años no fue elaborada por abogados constitucionalistas o penalistas, sino por asesores en derechos humanos:
“Por lo que cuando liberan a los que presuntamente habían sido torturados, las organizaciones de derechos humanos y los propios abogados celebran que se haya emitido esa resolución”.
El mandatario señaló que su administración está trabajando para encontrar a los jóvenes y aclarar la investigación, por ello es que le pidió a todos a aquellos que están implicados:
“Pedirles que nos sigan ayudando, y quienes no lo están haciendo, que nos ayuden, y nosotros vamos a reconocerlo, si nos ayudan a que se termine de romper el llamado ‘pacto de silencio’, que nos ayuden”.
LEO
Por: Luis Valdés