Cerca de un grupo de 15 mujeres parejas de soldados rusos movilizados en la guerra con Ucrania se congregaron este lunes frente al Ministerio de Defensa en Moscú para pedir su regreso del frente y una reunión con el nuevo ministro Andréi Beloúsov.
Sentadas de rodillas ante las rejas del ministerio, sostuvieron pancartas que exigían el regreso de sus parejas, según imágenes difundidas en redes sociales.
“Estoy sola, estoy harta”, decía un cartel. “Beloúsov Andréi Removich, hable con nosotras, estamos aquí”, decía otro, pidiendo una cita con el ministro ruso recién nombrado.
Las asociaciones de mujeres o familiares de los movilizados rusos que reclaman su regreso son casi las únicas que siguen organizando protestas en Moscú, esto ante la incertidumbre del regreso de sus familiares.
Hasta principios de este año, seguían convocando este tipo de manifestaciones casi todas las semanas, a través de un canal de Telegram llamado “camino a casa”, en la tumba del Soldado Desconocido, a los pies del Kremlin.
Pero tras una serie de arrestos a finales de febrero, las protestas se volvieron más escasas. La policía había incitado a los medios a no acudir a estas reuniones.
Las mujeres que se congregaron este lunes quisieron permanecer en el anonimato y afirmaron que no formaban parte de la organización “camino a casa”, sino que eran familiares de hombres que luchaban en Ucrania, donde Rusia lanzó una ofensiva en febrero de 2022.
“Cada participante vino con intenciones diferentes. Una pedía la desmovilización de todos, otra solo la de sus familiares. Las esposas y madres de los movilizados están cansadas, quieren que sus hombres vuelvan a casa”, declaró Polina, una de las manifestantes.
La protesta tuvo lugar después de que el grupo y uno de sus líderes, María Andreyeva, fueran catalogados como “agentes del extranjero”, una herramienta de las autoridades que conlleva fuertes trabajos administrativos.
(Con información de AFP)
MC
Por: 24 Horas