El evento comenzó con un conteo regresivo que culminó en una brillante exhibición de luces que cubre más de 12 kilómetros del Centro Histórico de Puebla. Con más de 6 mil adornos distribuidos en árboles, postes y estructuras monumentales, el encendido de luces viste de verde, blanco y rojo las principales avenidas de la ciudad, incluyendo Reforma, 16 de Septiembre y Bulevar 5 de Mayo.
Los residentes, congregados en el zócalo y en las principales calles, recibieron el espectáculo con entusiasmo y aplausos, mientras el Palacio Municipal, el Zócalo y el Puente de Ovando se convertían en focos de atracción en esta celebración visual.
El alcalde Domínguez Sánchez también anunció que el próximo domingo dará inicio un videomapping especial, diseñado para complementar la iluminación con proyecciones que capturarán el espíritu del Día de la Independencia. Este video-mapping, una innovadora forma de celebrar, promete añadir una dimensión adicional a las festividades, integrando tecnología y arte en la celebración nacional.
Durante los meses de agosto y septiembre, las luces festivas no solo adornarán la ciudad, sino que también crearán un ambiente vibrante y acogedor para residentes y visitantes. La decoración, con sus diversos diseños patrióticos, busca fomentar el orgullo y la unidad nacional, y se complementará con una serie de actividades culturales a lo largo del periodo festivo.