Este martes, la coordinación estatal del IMSS-Bienestar, en conjunto con el director del Hospital del Niño Poblano (HNP), establecieron una mesa de diálogo con el personal de salud del centro médico con el objetivo de proporcionar mayor certeza laboral a los trabajadores tras las protestas en las que solicitaban mejores salarios, prestaciones de ley y mejora de sus puestos.
Durante un recorrido realizado este lunes por el periodico 24 HORAS, se obtuvieron imágenes de una serie de pancartas pegadas en los accesos y paredes del nosocomio. En dichos carteles, el personal de contrato demandaba mejores condiciones laborales así como respeto a sus derechos laborales.
‘Queremos salarios dignos’, ‘Héroes sin salarios dignos’, ‘Exigimos estabilidad laboral’ fueron algunas de las frases que colocaron los trabajadores en las pancartas para manifestar su molestia y exigir un diálogo con el IMSS Bienestar y la dirección general del Hospital.
Debido a que este tipo de manifestación no fue tomada en cuenta, los colaboradores y trabajadores decidieron continuar la protesta la mañana de este martes.
Cierran Boulevard del Niño Poblano
Con la finalidad de ‘meter presión’, el personal de enfermería cerró el bulevar del Niño Poblano para exigir que sean integrados en el desarrollo de basificación del IMSS Bienestar.
Tras 40 minutos de protesta, la dirección general del hospital junto al IMSS-Bienestar informaron que se abriría una mesa de diálogo con los colaboradores para escuchar sus peticiones y buscar soluciones.
Derivado de esto las vialidades fueron liberadas tras más de media hora de caos vial en la zona.
De entre todas las demandas que aquejan al personal médico, la principal es el sueldo, afirman algunos que reciben 3,200 pesos quincenales por la labor que desempeñan todos los días.
Muchos de ellos dieron su testimonio de forma anónima por miedo a represalias en su contra, pues manifestaron que muchos de ellos no han sido llamados para la segunda entrega de bases, al mismo tiempo señalaron que algunos tienen hasta ocho años brindando sus servicios y continúan con contratos eventuales.
‘La Secretaría de Salud nos llama cada seis meses para firmar contrato, no tenemos prestaciones, no tenemos seguridad social’ afirmaron ‘sobrevivimos con el salario mínimo de 3,200 pesos a la quincena y hay algunos que llevan hasta ocho años trabajando aquí y el sueldo no aumenta’, puntualizó uno de los demandantes.