Las negociaciones indirectas para una tregua entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza tuvieron un “comienzo prometedor”, aseguró Estados Unidos que, junto a Catar y Egipto, media para poner fin a un conflicto que ya dura más de 10 meses.
Las conversaciones se reiniciaron en Doha, la capital de Catar, tras fuertes presiones de los países mediadores para desactivar un conflicto con un potencial creciente de hacer saltar el polvorín de Medio Oriente.
“Hoy hemos tenido un comienzo prometedor”, declaró el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, agregando que las discusiones proseguirán.
Las conversaciones se basan en un plan de tres fases anunciado el 31 de mayo por el presidente estadounidense, Joe Biden.
La primera fase prevé una tregua de seis semanas y una retirada israelí de las zonas densamente pobladas de Gaza, así como un canje de rehenes en manos de Hamás por presos palestinos detenidos en Israel.
Desde el inicio del conflicto el 7 de octubre, desencadenado por una letal incursión de milicianos islamistas en el sur de Israel, los dos bandos solo pactaron una tregua, a fines de noviembre, durante la cual se canjearon rehenes secuestrados en Israel por presos palestinos.
Las conversaciones se celebran en presencia del director de la CIA, William Burns. También asisten los jefes del Mosad ―los servicios de inteligencia israelíes― y del Shin Bet ―la agencia de seguridad interior―, según la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Osama Hamdan, un responsable de Hamás, declaró que el movimiento no participó en la reunión, pero que estaba dispuesto a unirse a las negociaciones si éstas producían nuevos compromisos por parte de Israel.
“Si los mediadores consiguen obligar a la ocupación (israelí) a llegar a un acuerdo, lo haríamos, pero hasta ahora no hay nada nuevo”, dijo