El avión presidencial José María Morelos ya vuela desde hace meses en Tajikistán, exrepública soviética ubicada en Asia… pero el expresidente Andrés Manuel López Obrador dejó como herencia al actual Gobierno el deber de pagarlo hasta la mitad del sexenio; de hecho, este año se etiquetaron 336.1 millones de pesos, según datos de la Secretaría de Hacienda.
En 2023, el Gobierno federal concretó la venta del Boeing 787 por mil 659 millones de pesos y se anunció que esas ganancias serían para la construcción de dos hospitales en Guerrero y Oaxaca, los cuales todavía están en proceso.
El 28 de abril del año pasado, el día que el avión presidencial abandonó territorio mexicano, Jorge Mendoza Sánchez, director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), explicó en la Mañanera del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador que de los mil 658.7 millones de pesos de la venta del avión, mil 229.8 millones de pesos se utilizarían para finalizar los pagos del arrendamiento a dicha institución.
Ese día, señaló que para saldar la deuda se utilizarían mil 229.8 millones de pesos para liquidar la deuda, con un ahorro de 336.1 millones de pesos por intereses y otros 135 por gastos de operación.
Tras lo cual, el dinero sería devuelto a la Tesorería de la Federación para la construcción de los dos nosocomios.
Sin embargo, el plan de pago, contenido en el Presupuesto 2024, indica que este año se han etiquetado 387.6 millones de pesos para pagar el arrendamiento del avión, mientras que en 2025 serían 515 millones; en 2026, otros 512 millones, y en 2027, 218 millones de pesos.
De hecho, la Secretaría de Hacienda, en su último reporte actualizado en el tercer trimestre de este año, indica que el costo del avión presidencial es de 6 mil 370 millones de pesos y se culminará de pagar en 2027.
Es decir, en los hechos la liquidación no se realizó y de seguir con el esquema de arrendamiento, en el primer presupuesto del sexenio de Claudia Sheinbaum se tendrá que incluir el pago de la anualidad en la Defensa Nacional y lo mismo sucederá en 2026 y 2027, aunque el avión ya tiene más de un año fuera del país y con otros dueños.
Se desconoce si existe un mecanismo interno para la condonación de la deuda y cancelación del arrendamiento por 15 años con Banobras, pues a la fecha sigue apareciendo en el Presupuesto aprobado en 2024.
Fue el 14 de mayo de 2023 cuando el avión presidencial, tras labores de mantenimiento en Estados Unidos y el cambio de logotipos, voló al país asiático y el 17 del mismo mes lo estrenó Emomali Rahmon, presidente de Tajikistán.
En México, el Boeing 787, bautizado como José María Morelos, solo fue utilizado dos años y medio por el expresidente Enrique Peña Nieto, entre febrero de 2016 y noviembre de 2018.
Rifa simbólica
Durante el mandato de López Obrador se organizó una rifa simbólica del TP01; dicho sorteo se realizó el 15 de septiembre de 2020.
Según explicó Margarita González, entonces titular de la Lotería Nacional, durante la conferencia Mañanera del 11 de diciembre de 2020, los recursos fueron transferidos al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), organismo creado y desaparecido durante el sexenio de AMLO,
Una escuela de Ocotzingo, Chiapas, fue una de las ganadoras de un cachito de 20 millones de pesos, pero padres de familia denunciaron que tuvieron que huir de su comunidad por las presiones de grupos de la delincuencia organizada para invertir parte del dinero en la compra de armas.
Vuelos comerciales
Sin un avión presidencial a su disposición, la presidenta Claudia Sheinbaum viajará a Brasil este fin de semana, a la cumbre del G20, en un vuelo comercial de la aerolínea Copa Airlines.
El vuelo saldrá el sábado 16 de noviembre de la ciudad de México con dirección al aeropuerto internacional de Tocumen.
Hará una escala en Panamá y del aeropuerto de Tocumen se dirigirá al aeropuerto internacional de Galeao.