La exitosa saga de El Rey León continúa con una precuela que sigue la historia de Kiara, la hija de Simba y Nala. En esta nueva adaptación, que llega tras el éxito de su versión fotorrealista, la joven leona descubre su linaje y el antecedente de su abuelo Mufasa.
Rafiki, el sabio babuino, narra una leyenda sobre el pasado de Mufasa, quien fue huérfano desde muy joven tras una inundación y conoció a Taka, heredero de un linaje real. Juntos emprenden un viaje en el que los entrañables Timón y Pumba también juegan un papel crucial.
El ascenso de Mufasa y la tragedia
La historia muestra cómo Mufasa asciende al trono, siendo valiente en una familia en la que no nació, mientras Taka, quien más tarde será conocido como Scar, es consumido por la envidia y los celos. La trágica muerte de Mufasa, durante la estampida, es el punto culminante de esta historia.
Dirigida por Barry Jenkins, ganador del Oscar por Moonlight, esta película se enmarca dentro de la tendencia de Disney de llevar sus clásicos a una nueva dimensión en fotorrealismo.
Opiniones divididas del público
Desde su anuncio, la película ha generado opiniones encontradas. Mientras algunos consideran que la historia es innecesaria y agrega un argumento sobre algo que nunca fue preguntado, otros aplauden la expansión del universo de El Rey León.
En Rotten Tomatoes, las críticas se dividen entre positivas y negativas, con una aceptación del 60%. Mientras que algunos como David Fear de Rolling Stone ven la película como una estrategia de los estudios para mantener la nostalgia, Nicholas Barber de BBC critica que la historia plantea más preguntas que respuestas.