Movilidad urbana en Puebla: Una ciudad sometida al tráfico
Puebla enfrenta uno de los mayores problemas urbanos de las ciudades modernas: la mala movilidad urbana. A pesar de ser una de las ciudades más dinámicas de México, la congestión vehicular y los largos tiempos de traslado afectan a millones de poblanos cada día. Según cifras oficiales, en 2023 se registraron 13,431 accidentes de tránsito en Puebla, lo que pone en evidencia la grave situación de la movilidad.
Aumento del parque vehicular y la falta de alternativas
En Puebla, como en muchas otras ciudades, el aumento del parque vehicular ha contribuido al tráfico caótico. Según el INEGI, en 1980 México tenía aproximadamente 5.7 millones de vehículos registrados, cifra que ha aumentado significativamente. En la actualidad, las autoridades locales destinan grandes recursos y espacio para fomentar el uso del automóvil, una situación que genera congestión y contaminación en la ciudad.
Francisco Valverde Díaz De León, experto en hábitat y sustentabilidad, menciona que la ciudad de Puebla favorece el uso del automóvil debido a la falta de alternativas viables de transporte público. Esto ha generado un círculo vicioso de más vehículos y más congestionamiento, donde la solución tradicional ha sido más infraestructura vial, un enfoque que no resuelve el problema de fondo.
Demanda inducida: Un problema creciente
El concepto de “demanda inducida” explica cómo la construcción de más carriles o avenidas lleva a la proliferación de más vehículos, lo que a su vez causa más congestión. Zeus Moreno Cortés, especialista en hábitat y equidad territorial, señala que Puebla ha desarrollado una ciudad que favorece la velocidad y distancia, dos factores que aumentan la necesidad de más infraestructura vial. Sin embargo, esta solución es limitada y contribuye a la saturación del tráfico.
El activismo por la movilidad en Puebla
El activista Armando Ishikawa Pliego, miembro del colectivo Ciudad Activa, denuncia la falta de atención a las necesidades de peatones, ciclistas y usuarios del transporte público. Según Ishikawa, en Puebla lo público se ha convertido en una opción para quienes no pueden acceder a algo mejor, reflejando un modelo de ciudad que prioriza a los automovilistas. A pesar de los desafíos, Ishikawa cree que los poblanos tienen el poder de reclamar su derecho a una movilidad más segura y accesible.