El Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, ubicado en el corazón de México, es una zona volcánica activa que enfrenta grandes desafíos ecológicos. Por ello, instancias educativas, gubernamentales y comunitarias organizan el XIV Simposio de Investigación, con sede en la BUAP, para compartir conocimientos sobre su conservación y monitoreo. El evento busca fomentar la vinculación e identificar necesidades en este importante espacio natural protegido.
En la inauguración, Ygnacio Martínez Laguna, vicerrector de Investigación de la BUAP, destacó la importancia de compartir experiencias sobre el Parque Iztaccíhuatl-Popocatépetl. Subrayó que este simposio se ha consolidado como un espacio clave de intercambio de saberes y reflexión sobre los retos ecológicos y científicos del parque. Además, mencionó que la conservación de este espacio es crucial para la biodiversidad y el bienestar de las comunidades cercanas.
Martínez Laguna también describió al Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl como un símbolo de la riqueza natural y cultural de México. Señaló que su preservación es vital para el equilibrio ecológico de la región, que enfrenta amenazas derivadas del cambio climático. En este sentido, el simposio incluye mesas redondas, conversatorios y presentaciones sobre el monitoreo volcánico y la conservación de especies endémicas, como el teporingo y el ajolote.
Durante el evento, también se conmemoró el 30 aniversario de la actividad del volcán Popocatépetl. Francisco Javier Salazar Valerio, director del parque, destacó que la colaboración con las comunidades locales es esencial para prevenir desastres, como incendios forestales, y garantizar un manejo adecuado del territorio. Subrayó el papel del Cupreder en la protección de esta área natural.
Por su parte, Enrique Guevara Ortiz, director del Cenapred, recordó la evolución del monitoreo del Popocatépetl. Desde la creación del Centro en 1990 hasta los avances en la instalación de sistemas de monitoreo avanzados, como imágenes satelitales y magnetómetros, que permiten anticipar posibles riesgos.
Este simposio representa un paso crucial en la lucha por la conservación ambiental del Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl y la gestión de riesgos naturales en la región.