Javier N podría pasar 80 años en prisión, pues la defensa de la familia de Cecilia Monzón Pérez buscará la pena máxima de 60 años por el delito de feminicidio y 20 más por violencia familiar, confirmó la hermana de la víctima, Helena Monzón, en entrevista desde España para 24 HORAS.
La abogada indicó que el equipo legal del implicado no ha presentado evidencia que desmienta que Javier N fue el autor intelectual del asesinato, durante los tres años que lleva el proceso.
“Ya se superaron todas las etapas para que se realicen estas actividades por parte de la defensa legal, pero jamás hicieron actividad probatoria alguna, ni el más mínimo intento”, indicó en una conversación telefónica.
Helena Monzón señaló que los abogados del expolítico priísta han solicitado múltiples aplazamientos, algunos mediante recursos legales cuestionables, un formulismo utilizado de forma “abusiva y ridícula”, aseguró.
Respecto al juicio por el delito de violencia familiar y que Cecilia denunció en vida, la abogada española aclaró que se encuentran a dos audiencias de obtener una sanción, sin embargo, nuevamente, por una serie de amparos, el proceso se retrasó.
Entre los recursos solicitados por la defensa del presunto responsable está la suspensión del juicio en su contra, que ya fue rechazada en tribunales. También la petición de que sea juzgado en la capital del Estado de México.
“El implicado no se encuentra en Toluca desde hace más de un año. ¿Qué tiene que ver Toluca en todo esto? Nada. Solamente es meter el amparo porque quieren alargar el proceso”, enfatizó Helena Monzón.
Hay que señalar que actualmente Javier N se encuentra bajo la medida cautelar de prisión preventiva, la cual ganó la defensa de Cecilia Monzón en diciembre del 2024.
JUICIO ORAL, SIN FECHA
Respecto al delito de feminicidio, la hermana de la víctima explicó que el juicio iniciará en breve, aunque no hay fecha definida para la primera audiencia.
No obstante, confirmó que hay material probatorio, por lo que el juicio podría dilatarse seis meses, sin embargo, eso dependerá de cuántas sesiones les impongan y que la defensa legal del imputado no recurra a más recursos.
“Buscamos que formalmente tengan las menores oportunidades posibles de lanzar un amparo por cualquier cuestión y, para esto, el trabajo tiene que ser impecable por parte de la Fiscalía, para que no nos encontremos con situaciones que den lugar a amparos (…) El juicio debería evolucionar perfectamente de inicio a fin”, recalcó.
Helena Monzón afirmó que el caso se encuentra en un momento clave pues, tener un juicio oral da la sensación de que ya se superó el proceso, pero reconoció que no es así. Ante ello, se requiere voluntad para hacer justicia, enfatizó.
“Esa es la dificultad con la que nos encontramos. Ya lo hemos visto en varias situaciones a lo largo del país, con casos en donde puede parecer perfecto para una condena, pero termina siendo una pérdida de tiempo y recursos para todos. Y eso no puede pasar en este caso, yo seguiré exigiendo hasta el final”, concluyó.