Entre febrero y mayo se eleva el riesgo de incendios en municipios de la Sierra Norte del estado, debido al aire seco y la disminución hasta del uno por ciento en los niveles de humedad, aseguró el académico de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Francisco Javier Sánchez Ruiz.

Aunque la zona centro y poniente de la entidad presentan las mismas condiciones, la actividad del volcán Popocatépetl y el material incandescente que emite son la causa de posibles fuegos en bosques y pastizales, indicó el catedrático.

“No estamos exentos, porque la humedad relativa es de 11 por ciento, y esto puede ayudar a que se generen y propaguen incendios”, comentó el especialista en Ingeniería Ambiental .

En los últimos meses, “la calidad de aire ha sido de regular a mala en Puebla, lo que ha provocado una evaporación súbita y esto, más la quema de pastizales o de hojas secas, incrementa la posibilidad de fuegos incontrolables en cualquier zona, incluso en la propia capital del estado”, expresó. 

Cuestionado sobre el periodo de mayor riesgo, Sánchez Ruiz expresó que el periodo más crítico inicia en febrero y concluye en mayo, cuando se espera el inicio de la temporada anual de lluvias.

Por ello, el académico de la UPAEP consideró que la ciudadanía y las propias autoridades deben implementar acciones preventivas, como el corte manual de los pastizales en terrenos de cultivo en lugar de quemarlos. 

Respecto a las hojas secas que caen de los árboles, Sánchez Ruiz recomendó la generación de composta o utilizarlas como nutrientes en los jardínes. 

Además, hizo un llamado a evitar el uso excesivo o innecesario de combustibles fósiles y pidió que las autoridades apresuren la revisión de las unidades del transporte público, para sustituirlos por vehículos eléctricos.

A nivel nacional, el catedrático de la UPAEP recordó que los estados de Durango, Zacatecas y Aguascalientes presentan las condiciones de mayor riesgo para la propagación de incendios forestales.

En contraste, las entidades ubicadas al occidente del país, como Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Jalisco y Sinaloa, cuentan con aire húmedo constante, que inhibe la generación de fuegos en su zonas montañosas.

Cabe señalar que en 2024, Puebla se ubicó entre los siete estados que concentraron la mayor cantidad de conflagraciones, con 421 siniestros, de acuerdo con datos divulgados por la Comisión Nacional Forestal.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *