El dirigente del PRI, Néstor Camarillo Medina, criticó la estrategia de seguridad en Puebla. Señaló que la participación de elementos de la Marina no es adecuada para los municipios.
Camarillo expresó su preocupación por la seguridad tras el asesinato de dos policías y el incendio de un OXXO en la capital poblana. El hecho provocó una manifestación de la Policía Municipal exigiendo mejores condiciones laborales.
El gobernador Alejandro Armenta Mier respondió a las críticas. En rueda de prensa, cuestionó la postura de Camarillo, diciendo que el senador carece de calidad moral para hablar del tema.
El gobernador utilizó una frase popular: "Para hablar con la boca grande hay que tener la cola chica". Además, en el mismo contexto, se presentó la renuncia de Gustavo Alonso González Zapata, subsecretario de Operatividad Policial.
La Secretaría de Gobernación recomendó cambiar al titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Fernando Rosales, por un mando de la Marina.
Camarillo afirmó que la Marina debería centrarse en proteger a la nación y no en cuestiones municipales. Además, criticó la estrategia de seguridad en San Andrés Cholula y en la zona conurbada de Puebla.
El líder del PRI insistió en que lo mejor sería capacitar a las policías municipales y proporcionarles más recursos, como armamento y mejores patrullas.
En cuanto a las críticas del PAN, Armenta defendió la estrategia de seguridad. Aseguró que su gobierno está trabajando en equipo para mejorar la situación de inseguridad en Puebla.
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