En la actualidad, la insuficiencia renal crónica puede considerarse un problema de salud pública, aseguró Miguel Ángel Morales Botello, jefe de Medicina Interna en el Hospital de Especialidades del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado de Puebla (ISSSTEP).
En entrevista con 24 HORAS, el especialista en nefrología recalcó que la mayoría de los centros médicos se encuentran rebasados ante la demanda de pacientes.
Morales Botello señaló que, a pesar de que hay un aumento de casos, sigue sin garantizarse la promoción a la salud, misma que podría ser de “suma ayuda” para prevenir los padecimientos relacionados con el riñón.
El especialista estimó que, actualmente, un nefrólogo puede llegar a atender hasta 14 pacientes diarios, mientras que 10 nefrólogos llegan a recibir hasta 2 mil 400 personas cada mes.
El especialista enfatizó que para prevenir la crisis de salud pública ante el incremento de padecimientos renales, es importante que se instituyan programas de promoción para concientizar sobre la prevención y detección oportuna.
“Con esto se podría incidir sobre la demanda de pacientes y las tasas de morbilidad en el área de nefrología; podrían, de cierta forma, disminuir la incidencia”, recalcó.
Señaló que esta problemática es alarmante, ya que, en 2003, cuando él entró al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a realizar su servicio social, tenían en promedio 220 pacientes en terapia sustitutiva; en cambio, el día de hoy “al menos en el ISSSTEP se está atendiendo un promedio de mil 800 pacientes”, señaló.
JÓVENES, LOS MÁS AFECTADOS
Morales Botello alertó que los casos de insuficiencia renal afectan cada vez más a la población joven, ya que, en una unidad de hemodiálisis, el 35% de los pacientes suman apenas entre los 30 y 45 años de edad.
“No necesariamente son diabéticos”, mencionó el especialista, al hacer hincapié en que la incidencia entre jóvenes está relacionada con problemas del ácido úrico, el colesterol o enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide o el lupus.
El jefe de la División de Medicina Interna en el Hospital del ISSSTEP indicó que los malos hábitos alimenticios, sumados al exceso consumista, influyen en el desarrollo de enfermedades del riñón.
TRATAMIENTO COSTOSO
Para iniciar una terapia de diálisis, los pacientes y sus familiares deben gastar hasta 12 mil pesos mensuales, más la colocación de catéter y hospitalización por 10 mil pesos más, lo que supondría una inversión de 25 mil pesos por persona.
Sin embargo, los precios anteriores solamente garantizan el principio del tratamiento sustitutivo, sin contar la compra de los medicamentos y el pago de procedimientos extras que se vayan necesitando, conforme la enfermedad vaya avanzando.
De acuerdo con el nefrólogo Morales Botello, las sesiones de hemodiálisis rondan entre dos y tres horas, en promedio, tres veces por semana, aunque las diálisis se pueden aplicar una o tres veces al día.
“Por eso hago hincapié en que hay que promocionar la forma preventiva de la enfermedad y tener un buen control de una situación crónica”, concluyó el doctor.