Las calles de Guatemala se vieron inundadas de protestas masivas contra la nueva ley del seguro vehicular obligatorio, que entrará en vigor el 1 de mayo. Miles de ciudadanos bloquearon vías principales, quemaron llantas y levantaron barricadas en rechazo a esta medida.
El gobierno de Guatemala publicó recientemente cuatro reglamentos en el Diario de Centroamérica, exigiendo a todos los vehículos motorizados contar con un seguro de responsabilidad civil. Aunque esta medida fue contemplada en la Ley de Tránsito de 1996, hasta ahora no había sido reglamentada. Los manifestantes argumentan que el seguro representa un gasto insostenible para una población en su mayoría empobrecida.
El Ministerio de Gobernación, liderado por Francisco Jiménez, calificó las protestas como "inaceptables", acusando a taxistas ilegales y a las maras de estar detrás de los bloqueos. En su defensa, el gobierno explicó que el objetivo del seguro es reducir la saturación hospitalaria causada por los frecuentes accidentes viales.
A pesar del respaldo de algunas asociaciones de víctimas de accidentes y transportistas, la ley ha generado un debate polarizado en redes sociales, con un 30% de los cibernautas exigiendo más información sobre su implementación. El gobierno asegura que el seguro también permitirá regular a los motociclistas sin licencia y mejorar la seguridad vial.
Con bloqueos que paralizan la capital, Guatemala enfrenta un desafío mayúsculo: equilibrar las necesidades económicas con la necesidad de mejorar la seguridad vial.