El Gobierno municipal de Puebla, encabezado por el alcalde José Chedraui Budib, presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra de exfuncionarios de la pasada administración, encabezada por el Partido Acción Nacional (PAN), por presuntas irregularidades financieras.
Así lo confirmó el tesorero municipal, Héctor González Cobián, quien detalló que el ayuntamiento de Puebla recibió un adeudo de 333 millones de pesos al cierre de la gestión de los exediles panistas, Eduardo Rivera Pérez y Adán Domínguez Sánchez.
En este sentido, reveló que existe otro tipo de irregularidades vinculadas directamente con el actuar de la administración anterior, mismas que ya fueron denunciadas ante la FGE y, aunque evitó dar más detalles al respecto, el funcionario resaltó que dicha denuncia “ya se encuentra caminando”.
Aunque inicialmente se había planteado liquidar esta deuda antes de que concluyera mayo, reconoció que esto no será posible. González Cobián explicó que sólo se podrá cubrir el 20 por ciento del monto que quedaba pendiente para este mes, ya que el equipo de la Tesorería detectó nuevos pagos por saldar y anomalías administrativas en los contratos, lo que impide cerrar por completo el pasivo heredado.
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“En la próxima comisión de Cabildo estaremos dando los montos puntuales (…) aunque no podremos estar al 100 por ciento. Hemos encontrado algunos temas administrativos y falta de cumplimiento de contratos en los que se tendrá que llevar un proceso legal”, señaló el tesorero municipal.
En este sentido, agregó que parte de los pasivos corresponden a empresas que incumplieron contratos, por lo que no se les liquidará. No obstante, Héctor González aclaró que esta situación no representa una denuncia penal en contra de dichas compañías, sino que será tratada como un asunto administrativo.
Cabe recordar que durante el proceso de entrega-recepción del ayuntamiento de Puebla, que culminó en octubre del año pasado, la administración del morenista José Chedraui Budib reportó un déficit financiero heredado de la gestión panista por 547 millones de pesos, de los cuales 333.9 millones correspondían únicamente a pagos pendientes, sin dejar suficiente saldo en las cuentas bancarias para saldarlos.
En ese momento, las autoridades municipales señalaron que las áreas más afectadas son aquellas de interés ciudadano, es decir, corresponden a obras, servicios públicos y áreas relacionadas con la seguridad pública.
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Dichas inconsistencias financieras equivalen casi al 10 por ciento del presupuesto del Gobierno de la ciudad, “lo que demuestra un desorden administrativo”, dijo el secretario de Gobernación, Franco Rodríguez Álvarez.
En ese entonces, la administración municipal de Pepe Chedraui dejó entrever la posible presentación de denuncias penales, en contra de los funcionarios municipales presuntamente responsables del llamado hoyo financiero.