La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó que el feminicidio de Eufrosina Jara, ocurrido en Tlacotepec de Benito Juárez, no fue cometido por su esposo, como se creyó.

La víctima, de 48 años, fue asesinada el 8 de mayo en su domicilio, ubicado en San Marcos Tlacoyalco. Las versiones iniciales apuntaban al esposo como principal sospechoso.

Sin embargo, el agresor fue su hijastro, Elpidio, quien presuntamente la atacó tras una discusión relacionada con el consumo excesivo de bebidas alcohólicas, según reportes de testigos y familiares cercanos.

Elpidio, recién llegado de Estados Unidos, convivía con Eufrosina en el mismo inmueble. Durante la pelea, la golpeó brutalmente con una barreta, causándole la muerte inmediata.

Después del crimen, intentó quitarse la vida, pero sobrevivió. Fue hospitalizado y actualmente permanece bajo resguardo médico, en espera de evolución para enfrentar el proceso judicial.

El sábado 10 de mayo, en pleno Día de las Madres, se realizó simultáneamente la audiencia inicial de Elpidio y el sepelio de Eufrosina, generando consternación local.

Mientras vecinos y familiares despedían a la víctima, la audiencia de control se efectuó de manera remota desde la Casa de Justicia de Tehuacán, bajo custodia policial.

En redes sociales, hijos, nuera y otros allegados compartieron mensajes de dolor, exigiendo justicia y una investigación clara, temiendo impunidad ante lo ocurrido.

Mensajes como “Falta mi tía Eufrosina”, “Ni una más”, o “Que este crimen no quede impune” reflejan el sentir generalizado de una comunidad golpeada por la tragedia.

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