El diputado local del Partido Verde, Miguel Márquez Ríos, negó tener vínculos con la granja de criptomonedas hallada en Juan Galindo, específicamente en Nueva Necaxa.
Afirmó que las investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) no lo implican. Por ello, exigió que los medios que lo señalaron emitan una disculpa pública.
Hasta el momento, ni la FGE, ni la Secretaría de Seguridad Pública ni el gobierno federal han revelado detalles sobre las investigaciones en torno al caso.
Márquez Ríos aseguró que colaborará con las autoridades para deslindarse totalmente del caso, reiterando que no está involucrado en actos ilícitos relacionados con criptominería.
También indicó que la FGE no ha encontrado ninguna actividad delictiva que lo vincule. "Hasta hoy no hay pruebas en mi contra", declaró.
El legislador, quien también dirige el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), responsabilizó a un grupo disidente de generar “grilla” sin pruebas en su contra.
“Nos han seguido por 30 años y no tenemos ningún problema”, comentó, al tiempo que pidió cesar las acusaciones sin fundamentos.
El operativo en la granja se realizó el pasado 31 de enero. Participaron elementos del Ejército, Marina y Guardia Nacional, en conjunto con personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Aunque la FGE no participó en el operativo, la CFE cortó el suministro eléctrico y retiró transformadores usados para huachicoleo eléctrico.
Un día antes del operativo, un testimonio señaló que el diputado alertó a su equipo para desconectar equipos y asegurar inmuebles.