Miles de personas se congregaron en Tel Aviv para exigir un cese al fuego en Gaza y la liberación de los 57 israelíes aún cautivos, al cumplirse 600 días de guerra.

La movilización se realizó en la llamada “plaza de los rehenes”, donde manifestantes mostraron pancartas con mensajes como “El pueblo con los rehenes” y dirigieron reclamos al primer ministro Benjamin Netanyahu.

Uno de los asistentes, Iair Horn, liberado en febrero, pidió al gobierno “terminar esta guerra y traer a los 58 rehenes”, aún sin noticias de su hermano desaparecido.

Desde temprano, actos conmemorativos se realizaron en todo el país. A las 06:29 horas, momento del ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, comenzaron vigilias simultáneas.

En kibutz Nir Oz, Karina Engel-Bart, también liberada, recordó que el cuerpo de su esposo sigue en Gaza. La comunidad internacional se mantiene alerta ante la crisis prolongada.

El mismo día, Netanyahu anunció la muerte de Mohamed Sinwar, comandante de Hamás, en un ataque aéreo en Jan Yunis el 13 de mayo. Sinwar era hermano del líder Yahya Sinwar.

Mientras tanto, Gaza enfrenta una crisis humanitaria severa. En Deir el Balah, palestinos desesperados saquearon un almacén del Programa Mundial de Alimentos.

En Rafah, una entrega organizada por una fundación humanitaria respaldada por EE.UU. generó caos. ONU y agencias humanitarias rechazaron colaborar con la entidad, calificándola de “distracción”.

La ofensiva militar israelí continúa. La Defensa Civil reportó 16 muertos más, sumando al menos 54,084 fallecidos en Gaza desde el inicio del conflicto.

Del lado israelí, el ataque inicial de Hamás dejó 1,218 muertos y 251 secuestrados. A 600 días, la guerra sigue sin solución aparente.

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