La reciente iniciativa de reforma constitucional presentada por la senadora Lilly Téllez, en su intento por modificar el Artículo 4 con base en criterios de sexo biológico al nacer, ha sido fuertemente cuestionada por el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la CDMX (Copred). Según este organismo, dicha propuesta es contraria a la dignidad de las personas y al principio de inclusión.
Lilly Téllez afirma que definir el género desde lo biológico ofrecería un criterio "objetivo y verificable" para dirimir controversias en espacios públicos como sanitarios, instalaciones médicas, deportivos o penitenciarios. Insiste en que su reforma no tiene intención de excluir al colectivo trans, sino de reconocer la relevancia del sexo biológico desde el punto de vista jurídico.
Sin embargo, Copred destaca que imponer una definición legal de mujer y hombre conforme al sexo al nacer implica excluir a la comunidad trans, recurriendo a una categoría sospechosa como "identidad de género" y reproduciendo estereotipos discriminatorios. Estos criterios, según el Consejo, erosionan la capacidad de las personas para definir su propia identidad.
Esta confrontación resuena en un contexto más amplio donde los derechos de las personas trans han sido reconocidos por vía interpretativa por instancias como la Suprema Corte de Justicia de la Nación y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Opinión Consultiva 24/17) . La propuesta de Téllez, por tanto, representa un giro preocupante hacia visiones retrógradas en materia de género.
En suma, mientras la senadora defiende que el cambio pretende clarificar procesos legales, el organismo especializado en derechos humanos advierte que, en la práctica, esta reforma pone en jaque los derechos y la identidad de millones de personas, especialmente las más vulnerables.

